Nuestro rostro es el principal centro de las miradas y lógicamente donde se ve reflejado con mayor intensidad el paso del tiempo. Ocultar las arrugas de la frente cada día es más difícil. Dando importancia a nuestras necesidades, surgen nuevas técnicas, la cuales están orientadas a devolvernos el aspecto joven que teníamos hace algunos años atrás.
Nueva tendencia
Las nuevas disposiciones estéticas dejan de lado ahora las operaciones de cirugía y apuestan por un rejuvenecimiento facial en 3D, esto gracias a la aplicación de una sustancia, llamada ácido hialurónico, la cual funciona para rellenar los pómulos y tensar las mejillas, suavizar las líneas oscuras de expresión y sobre todo eliminar el aspecto de cansancio.
¿Qué es?
El ácido hialurónico es un polisacárido, principalmente un glucosaminoglicano, molécula de azúcar natural del organismo que tiene como función retener a su alrededor moléculas de agua, comportándose como una esponja dentro de nuestro cuerpo y nuestra piel, dando estructura a los tejidos, pero a medida que van pasando los años, la presencia de esta sustancia disminuye considerablemente.
Indicaciones
El ácido hialurónico es un producto que extiende el tejido, por lo que relaja el cutis y disminuye las arrugas. Se conocen muy pocas contra indicaciones, pero se debe evitar en personas que tengan fragilidad capilar, que no tengan un buen control de salud como son diabéticos sin control, infecciones de la piel o padecer alguna enfermedad autoinmune.
¿Dónde se aplica?
Este ácido se puede aplicar en toda la cara, pero tiene mejores resultados en la parte central del rostro, ya que en los pómulos, comisuras y el contorno de los labios es donde se produce mayor absorción de grasa, como signo del paso de los años. Es decir, se aplica en zonas en las que se desea dar volumen de una forma más natural.
Duración
El ácido hialurónico va disminuyendo rápidamente en el organismo, por lo que sus efectos no son permanentes. Por lo tanto, se necesitan varias sesiones, todo depende de las indicaciones del especialista. Por ejemplo, la duración en el contorno de los labios es de un año y medio aproximadamente.
No obstante, es de suma importancia saber que con el tiempo dicho ácido ha sustituido el colágeno, ya que permite diferentes concentraciones, dependiendo de la zona donde se quiera colocar, en donde los resultados se conservan durante más tiempo.