Las perforaciones o los tan conocidos Piercings”, es una práctica cuyo objetivo es perforar alguna parte del cuerpo, insertado allí joyería o pieza metálica que por lo general son aretes. Esta práctica tiene su origen desde muchos años atrás, ya que ha estado muy relacionada con la cultura, creencias y la religión. Sin embargo desde unas décadas para acá su uso empezó a enfatizarse por gustos personales, el erotismo y hasta por la moda.

Con el pasar del tiempo el uso de los piercing se ha expandido por diferentes áreas del cuerpo como por ejemplo: Ceja, nariz, ombligo, labios, lengua, orejas, entre otras zonas del cuerpo.

Sin embargo en cada uno de estos lugares con el cuidado adecuado se puede cicatrizar la herida sin ningún tipo de peligro y así poder exhibir su pieza.

Perforación en los dedos como compromiso de bodas

Las tendencias en moda nunca paran y esto también es el caso de los piercing, gracias a que se ha hecho viral una forma de llevar estas prendas en el cuerpo y va relacionada al compromiso nupcial. A pesar de que este tipo de perforación no es nueva, no se realizaba con tanto afán y ha empezado a ser más rutinario en las parejas que la están adoptando como una forma de sellar su amor, como se hace con los anillos bodas, solo que acá, tanto el novio como la novia se colocan un piercing en su dedo anular.

A pesar de que la tendencia se ha dado a conocer como dolorosa, esto no ha sido impedimento para que sigan ganando seguidores y es debido a la popularidad de las imágenes y videos publicados en la redes sociales, especialmente Facebook e Instagram, sobre el uso de estos.

Profesionales de la salud se oponen al uso de estos piercing

Debido a su rápida expansión los profesionales del área de la salud se han anunciado que están preocupados por las consecuencias de esta práctica, ya que en el dedo se introducen dos piezas, una plana que hace la función de la base, y otra que es la que sale a la superficie y es una joya de fácil cambio y que es más llamativa.

Los médicos alegan dos posibles riesgos, el primero es sobre cómo se introduce la pieza, ya que si se hace de manera muy superficial corren peligro de que la pieza se mueva de su lugar y se desplace a otro sitio y si lo hacen de manera muy profunda la piel comenzara a crecer y pueda afectar a los nervios y tendones.

Y el segundo riesgo es sobre el tiempo de curación, y que una perforación en esa área tarda en alrededor de un año en cicatrizar y las probabilidades son más altas de una infección.