Cuando sientes que debes ir de inmediato al baño luego de haber consumido una leche o un licuado es algo que le puede suceder a cualquier amante de la lactosa, ya que es una de los primordiales síntomas de ser intolerante a la lactosa, el país mexicano está entre los primeros diez países que tienen más prevalencia de personas intolerantes a la lactosa. Esta confirmado y especificado por médicos que los síntomas de sufrir intolerancia a la lactosa se presentan treinta minutos luego de que los individuos consuman un lacto, también puede ocurrir luego de dos horas.

Si quieres saber más acerca de este tema, si te gustaría reconocer los síntomas de este padecimiento no dejes de leer, porque aquí te los contaré. La realidad es que nuestro cuerpo nos revela si en verdad somos intolerantes o no por medio de estos síntomas, uno de ellos es la distensión abdominal o hinchazón del abdomen, otro de los síntomas son los cólicos o dolor en el abdomen, también eres intolerante si tienes diarrea, o si tienes gases, otro síntoma son los vómitos o las nauseas, así como la pérdida de apetito, y otro de los síntomas son dolor de cabeza y acné.

Todos estos síntomas de la intolerancia pueden empezar siendo leves e ir aseverándose, todo va a depender de la cantidad de lácteos que se consuman y que puedas llegar a tolerar, pero es imprescindible que sepas que la intolerancia es diferente a ser alérgico a la leche, ya que la alergia es una reacción no positiva a las proteínas de la misma.

¿Pero que ocasiona la intolerancia? Lo que sucede es que el intestino delgado elabora una enzima que se llama lactasa, y sirve tanto para dirigir como para absorber el lácteo, cuando un individuo tiene una producción baja de esta enzima, no puede absorber de manera correcta la lactosa, lo que hace que se dirija al intestino grueso, convirtiéndose en liquido y también gases.

Algunos individuos logran superar el malestar modificando su alimentación, o limitando la ingesta de productos lácteos, el secreto se haya en identificar el nivel de intolerancia que se tiene con la ayuda de un médico especialista.