Haz probado todo lo que se conoce como técnica, pero ninguna te resulto efectiva, y sí es que un snack entre cada comida es casi inofensivo, pero el ingerirlos incesantemente puede hacer que tengamos más calorías de las que deseamos, y que subamos de peso, lo peor es que no frenan nuestra hambre, sino que nos da más, por ello te contaré como engañar al estomago para que crea que se encuentra lleno con el fin de que no ingieras más algo que no te ayuda en nada.

Estos son los cuatro trucos que engañaran a tu estomago para que piense que se encuentra lleno, en primer lugar debes tomar agua, es una forma eficaz de mantenerlo lleno, si tu cerebro o tu estomago notan que lo quieres engañar ingiere alguna fruta o verdura que sea hidratante como lo pueden ser las manzanas o los pepinos, que se hallan llenos de vitaminas, fibras, minerales y agua.

En segundo lugar come menos cantidad en un plato pequeño, según un estudio esto hará que pienses que comes más a causa de la percepción, los platos grandes hacen que la porción parezca reducida, mientras que los pequeños producen lo contrario; como tercer truco te recomiendo que escojas un tenedor que sea más grande, éste hará que imagines que la porción que ingieres es mayor, utilizar un utensilio grande engaña haciendo pensar que ingieres más de lo que en realidad es.

En un estudio se descubrió que las personas a las que se les había entregado un tenedor más grande comieron menor cantidad, dejando más alimento en sus platos, en comparación con personas a las que se les había entregado un tenedor más pequeño.

Y como cuarto y último consejo deberías masticar más lentamente tu comida.

Se demostró que comer y masticar despacio le da a tu organismo el tiempo necesario para indicarle a tu cerebro que se encuentra satisfecho, una excelente regla es dejar los cubiertos entre cada bocado para que permita desfrutar mejor de tu comida, así que ya lo sabes, tenlo muy en cuenta, no te vas a arrepentir de poner estos consejos en práctica, no vas a perder nada con intentarlo.