El Parlamento de Gran Bretaña ha logrado aprobar un aplazamiento de la fecha de la entrada del “Brexit”. Si el nuevo plan negociado por la ya cuestionada primera ministra no se llegase a aprobar, la nueva fecha tendría que ser el 12 de abril. Theresa May ya ha confirmado a su grupo en el Parlamento que está dispuesto a entregar su puesto si respaldan, en este momento, su acuerdo del “Brexit”.
Theresa May busca que la Cámara de los Comunes acepte la votación
El Parlamento de Gran Bretaña ha aprobado este mismo miércoles una enmienda para que se aplace para activar el “Brexit” en caso de que el acuerdo que ha sido presentado por la primera ministra del país británico, Theresa May, logre la luz verde por parte de la Cámara de los Comunes.
La enmienda ha salido gracias a 441 votos a favor y 105 que han dicho no. En el caso de que el acuerdo no logre salir adelante, la nueva fecha para el Brexit sería el 12 de abril.
Esta votación ha tenido lugar poco después que la propia Theresa May llevase a cabo una reunión con los tories en el órgano de gobierno que conforma el Partido Conservador en el Parlamento y les ha ofrecido su dimisión para lograr sacar adelante la siguiente fase del Brexit, siempre y cuando apoyen el acuerdo que ha sido negociado entre Bruselas y Londres durante una tercera votación.
Después, la propia oficina de Theresa May envió un comunicado a los diputados del bando conservador para informarles que la carrera para encontrar un sucesor a la primera ministra se iniciará después de mayo, cuando la salida de Reino Unido de la Unión Europea tenga lugar.
Un nuevo texto que evite problemas fronterizos
La Cámara de los Comunes ha rechazado en dos ocasiones, el 15 de enero y el 12 de marzo, el acuerdo para sacar adelante el Brexit, pero todo indica que Downing Street buscará una tercera votación para el próximo viernes para que sea la definitiva.
John Bercow, actual presidente de la cámara baja, ya ha advertido que no puede ser el mismo texto en esta ocasión.
Por el momento, en todas las votaciones la mayoría del bando conservador se ha negado a conceder luz verde al Acuerdo de Retirada por el conocido como “backstop” o el mecanismo de emergencia que ha sido diseñado por ambas partes para evitar con el Brexit un nueva frontera dura entre Irlanda e Irlanda del Norte.
Pero, algunos tories ya han declarado que están sopesando la idea de dar luz verde al acuerdo ya que es la opción menos mala de todas las que hay encima de la mesa: una salida llena de caos, cancelar la separación u organizar un segundo referéndum. En un primer momento, estaba previsto que el Reino Unido abandonase Europa el próximo viernes, pero no ha sido posible.