Varios medios de comunicación han publicado un dato preocupante en la ciudad de Barcelona: la lista de espera para conseguir un piso de alquiler social se ha disparado un 42% durante estos cuatro años de Ada Colau al frente del Ayuntamiento de la ciudad.
Habría una cifra muy alta sin atender de solicitudes: el número sería de 39.173, que significa 11.726 solicitudes más que en el pasado año 2015.
La vivienda es el segundo tema que más preocupa en Barcelona
En la ciudad hay dos temas que preocupan con diferencia a sus ciudadanos: la inseguridad y la vivienda (por el aumento desproporcionado de los alquileres y la presión que están realizando los fondos buitres en la ciudad).
Ada Colau llegó al poder del Ayuntamiento con la promesa de encontrar una solución al problema habitacional, que es una verdadera emergencia en la ciudad catalana. Ahora se han publicado los datos de la Agencia de la Vivienda de la Comunidad Autónoma de Cataluña que demuestran que los resultados que se han conseguido no tienen mucho que ver con lo prometido: la lista de espera para poder tener derecho a un piso de alquiler social ha pasado de un total de 27.447 solicitudes en el año 2015 -cuando Ada Colau consiguió llegar a la alcaldía-, a una cifra mucho mayor el año pasado, en el 2018, 39.173 solicitudes. Esto significa que en el periodo de tres años el plazo de espera de estas solicitudes ha aumentado en un 42,7%.
Este dato también se refleja en la ilusión de los ciudadanos. El acceso a una vivienda se ha convertido en una de las primeras preocupaciones en las encuestas realizadas a los ciudadanos de Barcelona. En el último barómetro de las preocupaciones de los barceloneses, la vivienda solo es superada por la inseguridad tras meses estando en el primer puesto.
El aumento en la lista de espera para poder entrar en un piso de alquiler social que se está viviendo en la ciudad de Barcelona contrasta con los datos que se registraron con el anterior alcalde, Xavier Trias, que logró bajar las solicitudes de la cifra de 30.572 (2011) hasta las 27.447 (2015).
El aumento de los requisitos por parte de un barcelonés para poder acceder a una vivienda pública no es la única promesa incumplida por parte de Ada Colau en el área de vivienda.
Durante la campaña electoral, Ada Colau prometió que se construirían un total de 4.000 pisos de protección oficial, pero cerrará su mandato con un número que apenas llega a los 700. Y del número de 4.000 que aseguraba que el Ayuntamiento iba a adquirir, tampoco se ha llegado ni a los 700. O sea, Ada Colau no habría llegado ni a una cuarta parte del número prometido a lo largo de la campaña electoral de hace cuatro años.
Todos estos datos han provocado que la actual alcaldesa se haya puesto las pilas en la precampaña electoral para las municipales.
En septiembre del año 2018, la propia alcaldesa en una rueda de prensa aseguró que había 4.644 viviendas en fase de edificación, pero dichas construcciones no estarán concluidas antes del 26 de mayo, que es la fecha en la que tendrán lugar las próximas elecciones municipales.
Por otro lado, en Barcelona, el precio del alquiler no ha dejado de aumentar en estos años. Desde el tercer trimestre del 2015, el precio medio de las viviendas de alquiler de la ciudad ha aumentado en unos 200 euros. Por ejemplo, el precio medio de un alquiler ha pasado de los 765 euros al mes hasta los 954 euros (último trimestre del pasado año 2018).
Ha recibido duras críticas de la PAH
Por otro lado, la lista de espera de la Mesa de Emergencia habitacional de la ciudad de Barcelona no ha parado de crecer. Actualmente, en la susodicha lista habría 562 familias.
Estos datos han provocado muchas críticas hacia la gestión de la vivienda en Barcelona por parte de Ada Colau. Los primeros que la han criticado han sido los miembros de la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca), asociación que le dio la fama y la catapultó a nivel político.
