La tensión que vive la política española desde hace meses ha llegado este miércoles a límites insospechados en el Congreso de los Diputados. En el transcurso de la Sesión de Control al Gobierno, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, se ha visto obligada a expulsar al portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, tras un rifirrafe con el ministro de Exteriores, Josep Borrell.

Además, Pastor ha censurado a los grupos parlamentarios por los insultos que se han dedicado durante la sesión de control.

De este modo, ha ordenado que se retiraran del diario de sesiones los términos "fascista" y "golpista"; calificativos que desde el martes se venían intercambiando las bancadas de Ciudadanos y Partido Popular con la de Esquerra Republicana de Cataluña.

'Cada vez que me llamen golpista yo les diré fascistas'

La presidenta ha echado del Salón de Plenos a Rufián tras llamarle al orden por dos veces por ponerse de pie y hablar sin tener el uso de la palabra, advirtiéndole previamente que si continuaba con su actitud, tendría que abandonar el hemíciclo. El diputado de ERC mantenía en ese momento un tenso choque dialéctico con Borrell, aprovechando su turno para avisar a los de Rivera de que cada vez que le llamen "golpista" él les llamará "fascistas".

El jefe de la diplomacia española ha echado en cara al político independentista que, en lugar de mantener un debate constructivo sobre política exterior, se dedique a arrojar sobre la Cámara Baja una "mezcla de serrín y estiércol". Tras expulsar Pastor a Rufián, todos sus compañeros de grupo parlamentario le han acompañado fuera del Pleno.

En ese punto, el ministro socialista ha acusado a uno de los diputados de ERC de escupir sobre él cuando pasaba junto a su escaño para salir de la sala. Fuentes de la dirección del partido catalán han negado al diario El País que algún miembro de su grupo haya escupido al responsable de la cartera de Exteriores.

Pastor asegura que le llaman institutriz

La presidenta del Congreso, visiblemente enojada y al borde del llanto, ha recriminado a todos los partidos presentes en el hemiciclo la postura adoptada en los últimos plenos, en los que han tomado como norma insultarse y faltarse el respeto mutuamente, actitud que Pastor considera "impresentable".

Además, la tercera autoridad del Estado y diputada del PP, ha aprovechado la reprimenda para revelar que hay veces que, desde la mesa de la Presidencia, escucha cómo algunos diputados la llaman "institutriz" cuando llama la atención a alguien, lo que ha tachado de insulto "machista".