Ayer, Pedro Sánchez se reunió en Berlín con la canciller alemana Angela Merkel. Como es tradición, Merkel recibió a Sánchez con honores militares. El estrado desde donde ambos escucharon los himnos de sus respectivos países se situó junto a una escultura del español Eduardo Chillida que desde el año 2002 se encuentra en la entrada de la Cancillería alemana.

Primera reunión de Merkel y Sánchez

Después de los saludos protocolarios, tuvo lugar la reunión a puerta cerrada, en la que se trataron temas de carácter bilateral, pero principalmente la agenda del Consejo Europeo, que se celebrará en Bruselas los próximos jueves y viernes.

En la reunión ha tenido un gran protagonismo la crisis migratoria, pues será también uno de los grandes temas a tratar en el Consejo Europeo esta semana. Ha sido la canciller quien ha destacado en la posterior rueda de prensa que otros países de la UE han recibido ya el apoyo del bloque en situaciones similares, como fue el caso de Grecia, en el punto más alto que tuvo esta crisis.

España, Francia y Alemania, como ya declararon en la cumbre sobre migración en Burselas del pasado domingo, y hoy han corroborado, abogan por la creación de "centros de desembarco controlados de inmigrantes" en suelo europeo para poder gestionar la situación de los inmigrantes que acudan a estos centros.

El Aquarius, punto de inflexión

Desde el drama del Aquarius, Europa parece que ha empezado a ver que necesita hacer un cambio en su política migratoria para poder hacer frente al desafío migratorio que tenemos desde hace unos años en nuestro continente. Aunque España, en un arrebato de solidaridad haya decidido acoger a los inmigrantes del Aquarius, Europa no puede mirar para otro lado y tomar este "parche momentáneo" como solución final para este crisis que ya dura varios años.

Por ello, los tres grandes países de la Unión Europea, Alemania, Francia y España han acordado apoyarse y tomar medidas para poder subsanar lo mejor posible esta crisis, que si no se gestiona correctamente puede derivar en un incremento incontrolado de la inmigración o en tensiones entre los países miembros.

Así, después de que España decidiera recoger a los inmigrantes rechazados por Italia, el tema principal del Consejo Europeo de esta semana será la crisis migratoria y posibles soluciones. Podemos ver como una buena noticia que los participantes de la pasada cumbre en Bruselas sobre migración dijeron que se estaban produciendo avances significativos para la gestión de este desafío.