Pedro Sánchez, el secretario general del PSOE, ha vuelto a generar polémica tras su última aparición pública. Si hace apenas unos días recibía duras críticas por su nueva propuesta orientada a exhumar los restos de Franco, queriendo reformar de este modo la Ley de Memoria Histórica, ahora han sido sus formas en la capilla ardiente del ex presidente del Congreso de los Diputados, Manuel Marín, lo que ha encendido a los allí presentes.

El líder del PSOE se convirtió en la comidilla de todos los asistentes a la capilla ardiente de Manuel Marín y es que, Sánchez se personaba en un acto solemne con un atuendo totalmente inapropiado: con un jersey granate y sin corbata que dejó atónitos a los allí presentes, quienes no dudaron en hacer comentarios de todo tipo.

El error garrafal de Pedro Sánchez en la capilla ardiente de Manuel Marín

A la capilla ardiente acudieron numerosas personalidades del mundo de la política como el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ex compañeros de partido como Zapatero e incluso el propio Rey Felipe VI, todos de riguroso luto para despedir al ex presidente del Congreso de los Diputados, menos Sánchez, a quien no le importó su atuendo para personarse delante de las hijas y la viuda del político socialista para mostrarle su apoyo en estos duros momentos.

Varias periodistas critican la vestimenta de Sánchez

Sin embargo, el atuendo elegido por Sánchez fue tan incorrecto para la ocasión, que incluso varias periodistas habituales en dar cobertura informativa a los sucesos del PSOE, criticaron al dirigente socialista a través de su cuenta de Twitter.

Así escribía la periodista Paula de las Heras en su cuenta: "La importancia de saber qué ponerse...". Otras como Esther Palomera admitían: "Y la sapiencia de dónde se está y dónde se va". Unas periodistas que se mostraron bastante indignadas con la falta de protocolo de Sánchez para acudir a un velatorio.

El líder del PSOE no cumple el protocolo en los actos públicos

Sin embargo, no es la primera vez que Sánchez acude a actos públicos perdiendo las formas con su vestimenta y causando vergüenza entre los allí presentes. La última de ellas, durante la recepción ofrecida en el Palacio Real por los actuales monarcas, Felipe VI y Doña Letizia, donde todos los asistentes cumplieron el protocolo mientras que Pedro Sánchez acudió con camisa y sin corbata, algo que generó gran polémica durante la recepción.