Desde que Ahora Madrid, hizo pública su intención de cumplir en la totalidad con lo establecido por la Ley de Memoria Histórica, también dejó en claro que lo haría con la ayuda de la colaboración vecinal y los distritos y que las resoluciones serían consensuadas.
En toda España han sido denunciados cerca de 38 alcaldes por desobedecerla y ostentar signos de la dictadura franquista en sus nomenclaturas, entre ellos, Ana Botella.
La citada ley fue aprobada el 26 de diciembre del 2007 y en su artículo 15 exige a las administraciones públicas que retiren oportunamente escudos, insignias, placas, objetos y menciones conmemorativas que exalten, ya sea de manera personal o colectiva, la sublevación militar, la Guerra Civil y la represión.
En Madrid se estima que hay una decena de placas y escudos que deberían cambiarse según lo dispuesto en el artículo mencionado. El incumplimiento de esta ley podría considerarse como delito de desobediencia y está contemplado en el artículo 410 del Código Penal.