La microhomofobia es el nombre que reciben las microagresiones que debe sufrir el colectivo LGBTI. En unos días en los que el asesinato de Samuel Luiz sigue presente en la memoria colectiva y se registra un ascenso en el número de ataques homófobos, conocemos testimonios de miembros de la comunidad que relatan la discriminación que han sufrido a diario. El periodista Pablo Rodero ha hablado con algunos de ellos; otros usuarios han compartido su experiencia en redes. Algunas personalidades públicas, como Jorge Javier Vázquez, también han hablado de sus experiencias de discriminación por su orientación.

De insultos por la calle a carrera profesional truncada, la homofobia en el día a día

Además de los crímenes violentos, las personas del colectivo LGTBI son más susceptibles de sufrir discriminación en su día a día. Un ejemplo es el de Isaías Fanlo, que relató en su Twitter cómo lo insultaron en el metro de Barcelona sólo por su orientación.

Esta discriminación no se queda solo en los comentarios en la calle, sino que además puede perjudicar la carrera laboral.

Este es el caso de Fito Ferreiro, cámara especializado en cubrir conflictos armados en zonas como Bosnia o Afganistán, que a raíz de convertirse en una cara visible del activismo LGTBI en 2005, empezó a ser ofrecido puestos de menor responsabilidad. Todo esto sumado a los comentarios por los pasillos o las risas en los despachos de sus jefes.

Mujeres trans y lesbianas, la homofobia más invisibilizada

Mientras que los homosexuales son los que registran una mayor número de discriminaciones, en proporción el colectivo más afectado es el trans. Silvia Sicore, mujer trans, cuenta a Rodero cómo, siendo una persona con una nómina que le permitía realizar los pagos sin problemas, tuvo que esperar seis meses para alquilar una habitación en Barcelona.

En efecto, encontrar piso supone un problema para muchos miembros del colectivo, motivo por el cual en muchas aplicaciones de búsqueda de compañeros de piso, muchos de ellos prefieren especificar que buscan a personas LGTBIfriendly.

Hace apenas una semana, el Observatorio contra la Homofobia, en Cataluña, recibió una denuncia de una mujer que recibió insultos lesbófobos mientras estaba en una terraza de un bar en un municipio del Tarragonés. Inmediatamente denunció los hechos a la policía. El suyo es un caso raro, puesto que, según la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Trans y Bisexuales, más de la mitad de los delitos de odio contra la comunidad no se denuncian.

Jorge Javier Vázquez relata cómo vivió la homofobia en primera persona

Recientemente, en su blog Jorge Javier Vázquez relató cómo ha tenido que lidiar con la homofobia desde niño. De hecho, incluso antes de saber que le gustaban los hombres, tenía que aguantar apodos e insultos de sus compañeros de clase. Tampoco dudó en pronunciarse abiertamente sobre las crecientes agresiones al colectivo LGTBI. "Una sociedad que no acepte la diversidad es una sociedad echada a perder. Intolerante. Agresiva" .

En su Twitter, también denunció la situación vivida estos días en España: "Está claro que no podemos bajar la guardia. Que la lucha continúa. Que tenemos que estar permanentemente alertas porque siempre habrá gente dispuesta a recortarnos los derechos que hemos conseguido".