El objetivo de las fuerzas de seguridad de la ciudad de Barcelona sería poder recuperar la seguridad que caracterizaba a la ciudad no hace mucho, pero parece que va a ser casi imposible. Las cifras son alarmantes: hasta agosto de este mismo años, han tenido lugar un total de 12 asesinatos en la ciudad, la cifra más alta en el mismo período que se recuerde.
Además, los vecinos de varias localidades próximas han decidido recuperar la figura de los serenos o se organizan para llevar a cabo patrullas ciudadanas en un intento desesperado de luchar contra la delincuencia.
Este repunte de la delincuencia en la ciudad ha obligado a los políticos a crear un plan estratégico
Las estadísticas oficiales demuestran que existe un repunte de la delincuencia en las calles de Barcelona que ha provocado un aumento de la presencia de policía en la ciudad y que, a nivel político, está planteando la creación de un plan estratégico para poder hacer frente a lo que varios expertos consideran que es una verdadera crisis de seguridad y, en otros casos, se habla ya de problema alarmante.
Más allá de debates de siglas políticas, la realidad es que los vecinos de la ciudad quieren recuperar la sensación de estar seguros en la calle, un propósito que parece haber calado entre los propios vecinos, quienes habrían apostado por buscar ellos mismos una solución: con iniciativas como las patrullas vecinales, el retorno de la figura del sereno o el empleo de grupos de Whatsapp para poder denunciar cualquier tipo de hecho delictivo.
Según datos de los Mossos d'Esquadra, hasta este mes de agosto han sido registrado un total de 12 homicidios, la cifra más alta que se recuerda en el mismo período, y han aumentado un 30% los robos realizados con violencia.
La policía autonómica ha llevado a cabo un total de 1.529 detenciones. Sorprende el número de menores de edad que han sido detenidos por delitos como el robo con violencia o la intimidación, lo que significa un 80% más en comparación con el mismo dato del año pasado.
El 2018 acabó con 1.627 personas detenidas y están seguros que este año se superará esa cifra
Aunque los Mossos no consideran que estos datos se puedan considerar ni excepcionales ni alarmantes, sí han confirmado a los medios de comunicación que van a aumentar su presencia en las calles para que los vecinos perciban que hay más seguridad.
Y seguirá el refuerzo de la unidad antidisturbios a la hora de realizar labores de seguridad como se ha estado haciendo en zonas bastante sensibles, como pueden ser Ciutat Vella, Port Olímpic o La Mina, donde se han visto obligados a intensificar la vigilancia y el control en el espacio público.
Por otro lado, los Mossos d'Esquadra incorporarán a 320 nuevos agentes que se han licenciado antes de iniciarse el verano. Una buena noticia ante la acusación por parte de los vecinos de que no se cubrían las plazas y no había agentes suficientes en la calle.
La Agrupación Reformista de la Policía también ha querido indicar su preocupación por lo que está sucediendo enviando una carta a Fernando Grande-Marlaska, actual ministro del Interior en funciones, para que acuerde con los sindicatos policiales y con los grupos que forman parte del Congreso, una propuesta que logre garantizar la seguridad de los ciudadanos, aunque sea desplegando a las fuerzas y cuerpos del Estado para que colaboren con los Ayuntamientos y la Generalitat.