Tierra de gracia que une los colores primarios junto a las estrellas. Tiene nombre de mujer y es aclamada por su belleza constantemente. La conocen por sus amaneceres, desiertos, selvas, ríos y paisajes. Por tener los secretos naturales más increíbles y por ser parte de la sonrisa de orgullo de cada uno de sus hijos.

Un clima ideal los 365 días del año que contagian de alegría hasta al menos favorecido. La hermandad con el vecino está garantizada, nunca se está solo, siempre hay apoyo. Simpatía por todos los rincones y ganas de salir para adelante, desde muy temprano en la mañana hasta las últimas horas de la noche.

Sin embargo, todo ha ido cambiando, desde sus risas hasta su salud. Se encuentra enferma, abandonada y lastimada. Todos los días es maltratada por aquellos que se titulan como sus dueños, el gobierno, que terminan siendo solo hijos rebeldes que se fueron por otro camino solo para conseguir el poder absoluto, un poder que, es imposible de alcanzar ya que mientras ella siga viviendo y su alma continúe, no lo obtendrán.

Por la actual crisis que está pasando ha perdido a una gran cantidad de hijos, que se han ido de su regazo buscando una mejor calidad de vida que ella, por más esfuerzo que haga, no puede ofrecerles por los momentos. Familias rotas, falta de medicinas, inseguridad en cualquier rincón, violencia y maldad abundan más que aquella felicidad que en algún momento nos posicionó como el país más feliz del mundo, inflación, corrupción, falta de alimentos y descuido en general...

Actualmente lucha con aquellos que la siguen amando incondicionalmente, se convirtió en un campo de guerra que solo exclama la libertad. Es valiente pero no puede ocultar más sus heridas, saca energía de la esperanza e ilusión que tienen todos de verla renacer. Además, el único miedo que tienen sus hijos es perderla para siempre...

Pero ella continúa, gritando libertad a los cuatro vientos.

Tiene apoyo en todo el mundo, incluso de aquellos que ni han visitado sus tierras. Su fuerza ha hecho florecer un sentido de pertenencia único desde que su nombre abunda en todos los noticieros. Todos esperan su renacimiento, saben que el momento más oscuro de la noche es cuando se acerca el amanecer, que la esperanza es lo último que se pierde y que luego de la tormenta sale el sol... Eso sí, todos están seguros que falta poco para que vuelva su sonrisa, sanen sus heridas y vuelva su luz a brillar.

¡Venezuela no se da por vencida!