La involución de nuestra evolución

Como cualquier materia, biológicamente, el ser humano envejece, se pudre o se marchita de manera inevitable. Sin embargo, el ser humano, como animal y a su vez, racional, también tiende a evolucionar y a priori no solo físicamente. Partiendo de muchas suposiciones y de certificaciones científicas el cerebro del ser humano crece, es más grande y tiende a una evolución más progresista, más libre o más ancha de miras. Para nuestra desgracia el propio concepto de ser humano conlleva incontables connotaciones negativas, una de ellas bastante curiosa es “la involución de nuestra evolución”.

La involución de nuestra evolución se refiere a que, los procesos naturales indican que de manera innata según avanza el tiempo los seres humanos se adaptan a él y que si no se sucede la involución, o lo que es lo mismo, tener ideales retrógrados.

A finales de los años 80 y principios de los 90 el auge del humor y la comedia se sucedió de forma múltiple debido a la posibilidad de tener, ya, libertad de expresión. Por aquel entonces los cómicos se expresaban libremente, sin tapujos y haciendo broma y guasa de lo que hacía pocos años atrás hubiese supuesto una buena pena de cárcel para muchos de estos cómicos libres. Creo que todos hemos visto sketches de “Martes y Trece” o de “Faemino y Cansado” en los que a veces parecen transgredir los límites de la comedia, sin embargo esto no sucedía porque era una buena época para el humor, quizá la mejor de todas en nuestro país.

Hoy, en el año 2017, claramente la involución de nuestra evolución está más en auge que nunca y muchísimo más visual que nunca si esta la relacionamos con el humor. La regla de tres del pensamiento evolutivo humano indica que, si en los años 90 no existían ciertos patrones de humor, si se hacían números y monólogos sin tener que hacer reparos a la ofensa pública hoy, a día 11 de abril de 2017 no se deberían encontrar ningunos límites principalmente porque es comedia.

Es todo bastante obvio, a nadie nos va a hacer gracia un chiste de los años 50 porque la comedia, al igual que el ser humano, tiende a evolucionar.

Revolucionarios

Comedia y comedia, y ¿qué es comedia?, ¿cómo se hace la comedia?, ¿quién determina los límites de la comedia? Últimamente aparece la palabra comedia en los medios muy a menudo (y no con un vestido de flores) y aparece la gente que hace comedia pero no como comediantes o artistas, creo todos hemos oído hablar de “revolucionarios”, “antisistemas” e incluso “terroristas”.

Sí, ahora la gente que se expresa libremente, como aquellos humoristas de la Transición española son revolucionarios y sí, también van a la cárcel, pero, para más inri, ya no hace falta que alguien ejerza de humorista, podría ser una chica de 21 años con proyectos de futuro de profesorado. Cualquiera puede verter a la basura su vida si se le ocurre hacer un chiste sobre el predecesor de nuestro ex-dictador. Sí, en el año 2017 parece ser que aún se pueden transgredir los límites del humor, a post de haber pasado una dictadura y de creer que podríamos ser libres todo ha parecido un ademán terriblemente dantesco.

Sencillamente sí tiene un envoltorio revolucionario, un envoltorio que se ha creado alrededor del sentido del humor.

Hoy el humor está penado y si se continúa realizando se convierte en combativo. Es escalofriante creer que como especie llegamos a un tope evolutivo y que hemos llegado al mismo y que además esté, en cierto modo, relacionado con el sentido del humor y la comedia.

Por favor, #HagámosElHumor.