"Come as you are" es una de las canciones más reconocidas de Nirvana y esa frase está en el cartel de bienvenida en su honor que ven los visitantes a su ciudad natal, Aberdeen. Esta frase podríamos decir que esconde el verdadero símbolo de lo que buscaba Cobain en su paso por el mundo, la verdad y sobre todo una honestidad a prueba de bombas.

Estos días se estrena el documental "Montage of Heck" que recorre de manera profunda la personalidad del músico, no es una película musical y sí un análisis de la personalidad del mito, con sus virtudes y sus debilidades.

Su hija Frances ha sido la principal causante del proyecto que contó al final con el apoyo de la siempre imprevisible Courtney Love y con el apoyo del compañero de banda amen de amigo, Krist Novoselic.

Una ausencia en este proyecto sorprende, Dave Grohl, el batería de la banda y líder de Foo Fighters se desmarcó del proyecto aludiendo problemas de agenda. Lo cierto es que si de Kurt es complicado dudar de su honestidad, menos de una de las principales personalidades del rock de las últimas décadas. La relación con la "Viuda del Grunge" fue bastante tormentosa y aunque finalmente hicieron las paces, quizás no se fío del proyecto.

El principal valor del documental, el cual ha obtenido buenísimas críticas, es que está realizado por un Brett Morgen, licenciado en mitología estadounidense y adecuado director del filme, ya que no es un fan declarado de Nirvana ni intentó ver a la estrella del rock desde un punto de vista musical.

No es un trabajo para reverenciar al último mito del rock, sino para ver la realidad que se escondía bajo su fama.

La prensa en un alto porcentaje fue más enemigo que otra cosa para un hombre tan sensible y tanto durante la gestación como en los primeros meses  de vida de Frances (La hija del matrimonio), tuvieron que asistir a multitud de rumores, desde que se seguían drogando a que eran malos padres o que no sabrían cuidar de su hija.

Los cientos cuando no miles de horas grabadas por el matrimonio, nos muestran que esos rumores eran mentira, aunque ahora más de 2 décadas  después ya poco importa.

Película recomendable para aquellos que quieran ahondar en la persona más que en el mito, aunque por descontado cualquier fanático del grupo o del "Grunge" encontrará atractiva esta revisión de un hombre que deja bien claro que pese a su éxito en todos los ámbitos, fue un ganador en público y perdedor en privado...