Uno de los resquicios más antiguos encontrados data de más de 11.500 años y se encuentra en la actual Turquía. El yacimiento se llama Göbekli Tepe y se forma por una serie de pilares a modo ritualístico lleno de cientos de inscripciones, incluso tallas humanas y, por supuesto, la representación de animales peligrosos como serpientes y escorpiones.

Rituales en los que los cráneos estaban presentes

Todo ello representa un conjunto ritual bastante complejo seguramente adorado por los cazadores-recolectores de la península que se fueron sumando durante aproximadamente 1.600 años.

Se han descubierto cráneos humanos con marcas ritualísticas que nos inducen a pensar que formaban parte de un ritual religioso que veneraba los cráneos o quizá la guerra.

¿Qué más hay?

Los arqueólogos encontraron en Göbekli tres calaveras con corte profundos seguramente realizado con algún elemento afilado que permitiese ejercer fuerza suficiente como para incidir en el hueso. No es de extrañar que veneren las Calaveras, ya que no es la primera vez que se hace, posiblemente para otorgar fuerza contra las presas o enemigos.

Se ha investigado la causa de las incisiones y afirman que no ha sido funerario ya que para realizar las incisiones se precisó de herramientas líticas lo que indica que no ha podido ser por causas naturales.

Además, no fueron asesinados de esa manera brutal, sino que se realizaron poco después de la muerte. Esto nos indica que seguramente hicieran las incisiones para venerar la pérdida de los familiares. De todas maneras, es la primera evidencia de muertos en Göbekli Tepe.

Otra iconografía encontrada representa animales que sostienen cabezas humanas, hombres sin cabeza, etc.

Se sabe que son hombres porque han representado erecciones.

¿Eran grupos nómadas?

En efecto, se trataban probablemente de grupos nómadas y seguramente sería un ritual utilizado en eventos importantes aunque no se sabe exactamente si ritos de paisajes o celebraciones. Sorprende porque erigieron ese tipo de estructuras monumentales en un período donde lo usual no era establecerse.

Este tipo de rituales comenzaron en el Paleolítico, alrededor de hace 12.000 años. No obstante, el hecho de haber encontrado este conjunto de calaveras hace pensar que pueden ser de época anterior debido a que las incisiones se realizaron con esa intención de profundidad a lo largo del plano sagital e incluso un agujero en el hueso parietal izquierdo para poder sostener la calavera con un palo.