Zeus "el dios de los dioses" tenía sus debilidades, como todo el mundo. Precisamente, nadie podía decirle que no a Zeus, ni si quiera un joven príncipe troyano llamado Ganímedes. Este es hijo de Laomedonte, rey de Troya.

Un príncipe raptado

Así es. El joven troyano fue raptado por el todopoderoso Zeus en el monte Ida, en Frigia que corresponde actualmente con Turquía. Ganimedes estaba relajado pasando el tiempo de exilio al que muchos héroes se veían sometidos durante su juventud, siendo pastor, por ejemplo. Zeus, que pasaba por allí quizá en busca de algo que le divirtiese, encontró a Ganimedes de casualidad y se enamoró de él, ¡al instante!

Vamos, que se enamoró a primera vista. Claro está, todo lo que Zeus quiere, lo obtiene. Y de esa manera, transformado en águila lo raptó y se lo llevó al monte Olimpo.

Platón y ciertas asperezas

Sabemos que Ganimedes era de origen troyano (y no griego) lo que quiere decir que se les identifica como parte de la creación más antigua de la mitología egea prehelénica. Es decir, Platón (que era un griego hecho y derecho) opinaba que el mito del joven troyano había sido creado por los cretenses para razonar y justificar las inclinaciones homosexuales. Sin embargo, más tarde fueron llevadas a Grecia.

El destino de Ganimedes

Una vez llegan al Olimpo, Zeus hizo que Ganimedes ocupara el puesto de copero, suplantando a Hebe y dejándola sin trabajo, aunque al parecer se casó poco después con Heracles.

Todos los dioses se quedaron con la boca abierta al observar la belleza de Ganimedes. No obstante, Hera (la esposa de Zeus) lo trató con desprecio como era de esperar. El odio que comenzó con Ganimedes es una de las explicaciones por las que Hera llega a tener un rencor fuerte por los troyanos, además de no haber ganado el premio a la mayor belleza en el juicio de Paris y la infidelidad (entre muchas otras) de Zeus con (esta vez) Electra teniendo a Dárdano.

El padre de Ganímedes echaba de menos a su hijo y Zeus, siendo comprensivo, envió a Hermes con dos caballos de alta velocidad para darle noticias. Hermes le dijo al padre del chico que ahora era inmortal y que tenía el puesto de "copero de los dioses", un puesto destacable. Finalmente, Ganímedes ascendió al cielo representando la constelación de Acuario, que todavía hoy en día está relacionado con el Águila.

El tema que trata la ausencia del hijo y los sentimiento de añoranza del padre, eran representados en la mitología sugiriendo que las relaciones homosexuales estaban realizadas bajo el consentimiento del padre.