De todos es sabido que la prensa impresa en papel vive tiempos difíciles. Las nuevas tecnologías han empujado a los Medios tradicionales a adaptarse a la nueva realidad de la red global. Es por ello que todos los medios generalistas cuentan ya con su plataforma en la red, que tiene mayor alcance y posibilidades de crecimiento que su versión impresa. A pesar de ello, los más tradicionales se resisten a dejar de lanzar sus ejemplares impresos. Pero más allá de esta realidad, muchos se han preguntado siempre cómo es posible que algunos de estos medios subsistan.
Ya la pasada semana analizamos la desastrosa situación económica de 13tv. Y hoy toca hacerse eco de la no menos deficiente situación económica del diario La Razón. No es ningún secreto que la mayoría de estos medios no se mantienen gracias a las ventas de su ejemplar físico, sino a la venta de espacios publicitarios (privados) y sobre todo, a la publicidad institucional. Mucho más jugosa y agradecida. Y es aquí donde se levantan todas las sospechas.
A finales del pasado año, un informe nos descubrió como el Gobierno del Partido Popular repartía su publicidad institucional de manera evidentemente interesada. Así, los medios que, en proporción, más publicidad institucional recibían (y por tanto dinero publico destinado a ella) eran La Razón y ABC.
Dos medios ideológicamente afines al gobierno. Cuando lo lógico sería que tal publicidad fuera asignada a los medios que cuentan con más lectores. Que están muy lejos de ser La Razón y el ABC, sino ElPaís.
Pues aún con la generosa cantidad de ayuda pública que ha recibido en todos estos años, las cuentas del diario La Razón son absolutamente ruinosas. Ha perdido más de 22 millones de euros desde que Francisco Marhuenda se hiciera cargo de su dirección, allá por 2008.
Además, podemos observar como sus pérdidas han estado enormemente relacionadas con los ciclos políticos. Así, cuanto más dinero se dejaba fue en la última etapa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Mientras que estas pérdidas se han ido suavizando más recientemente, con la llegada al poder del Partido Popular. Así que a la espera de conocer sus resultados del pasado año 2016, el diario lleva años sin sacar beneficios.
En este caso en particular. Debemos tener en cuenta que La Razón pertenece al mayor grupo editorial de España y uno de los más potentes en lengua hispana, El Grupo Planeta. Por lo que podremos presumir que su mantenimiento, a pesar de las pérdidas, se sustenta en las ganancias que el grupo recibe con sus demás negocios editoriales y audiovisuales (ATRESMEDIA, dueña de Antena3, LaSexta y OndaCero, entre otros). Por lo que no es difícil intuir también, que su mantenimiento y relevancia pública, obedecen más a fines ideológicos que a fines económicos.