Aportar imagen a la letra suele ser un acto bastante sorprendente para los lectores. No es poco habitual que se conozca hasta la obra completa de un autor, y no así su rostro. También el lector muchas veces, tal vez inconscientemente, busca resguardar a "su" autor, ese individuo que imagina como un personaje más del texto, y a quien teme que la realidad aniquile sin más avisos que con una foto.
Pero hay otra raza de lectores que desean conocer la fisonomía de quien escribió ese cuento o novela que tanto lo maravilla. Para ellos, se presenta una interesante propuesta artística en doble sentido, puesto que desde este momento se puede visitar la muestra fotográfica -"El rostro de las letras" - que cuenta la historia de la literatura española desde el Romanticismo hasta la Generación del '14.
La cita tiene lugar en Madrid (Sala Alcalá 31) y permanecerá abierta al público hasta el 11 de enero.
La selección de fotografías estuvo a cargo de Publio López Mondéjar, y es organizada y auspiciada por la Comunidad de Madrid, Acción Cultura Española y la Real Academia Española. A través de más de doscientas imágenes se retratan no solo a los escritores de ese periodo, sino también aparecen representadas varias escenas típicas del mundo literario como lo son las tertulias y encuentros de café.
Entre la selección, los visitantes se encontrarán con fotografías de autores ya clásicos de la historia de la literatura española y universal como Rubén Darío, Ramón Gómez de la Serna, Benito Pérez Galdós o Gustavo Adolfo Bécquer, entre otros de igual fama literaria.
La muestra se inicia con las primeras fotografías tomadas en 1839, ni bien se inventó el Arte de dibujar con la luz, y culmina con imágenes pertenecientes a escritores que conformaron la Generación del 14, a principios del siglo XX, entre los que se halla Ortega y Gasset. Además de fotos, los asistentes también tendrán la oportunidad de ver objetos y documentación perteneciente a esta época literaria.
Con la intención de reconstruir otro aspecto de la literatura española, también se cuenta la historia de la fotografía en ese país. Así, fotografía y literatura, las dos artes, se entrecruzan para dar consistencia a una historia más allá de lo escrito.