Casi 300 años de prisión. Esta ha sido la condenada que ha dictaminado la Audiencia Provincial de Madrid contra Dumitru R. N., considerado como el pederasta "más peligroso de España". Esto tras abusar a más de una veintena de niñas, entre cuatro y 13 años y luego difundir el material gráfico en una gran red de pedofilia de toda Europa. El condenado tiene dos hijos, está casado y tiene 50 años.

El condenado estaba acusado de abusar de 24 menores entre cuatro y 13 años de edad

Dumitru fue detenido en julio de 2018 en el marco del caso Balrog en el municipio madrileño Colmenar de Oreja, acusado de haber abusado de 24 menores entre cuatro y 13 años.

La propia Unidad Central de Ciberdelincuencia denominó al hombre de 50 años como el pedófilo más peligroso "nunca antes visto en España". Según el fiscal, las autoridades a cargo de la operación dieron con él porque se grababa la cara, tatuajes, hablaba en su idioma nativo y mostraba las diferentes estancias de su domicilio. Por ello, le imputan más de una treintena de delitos, donde destacan delitos continuados de abusos, de elaboración, tenencia y distribución de material vinculado con ellos. También se le aplica como agravante que hubiera hecho uso de su superioridad.

El hombre de 50 años ha sido condenado a casi 300 años de prisión, pero solo cumplirá 20 de ellos

Durante su declaración, Dumitru admitió los abusos y su posterior difusión en redes de pederastia, así como pidió perdón a las familias afectadas.

El hombre de 50 años se ganaba la confianza y entablaba amistad con los padres de las víctimas menores. Así, cuando se ofrecía a recoger y llevar al colegio a las niñas, las acababa trasladando a su vivienda donde llevaba a cabo lo ya referido. Por ello, ha sido condenado a casi 300 años de prisión durante el juicio. Sin embargo, permanecerá solo 20 años de ellos (el máximo legal permitido en España).

Por otro lado, las indemnizaciones a las víctimas oscilan entre 10.000 y 20.000 euros.

Rechazan un posible alcoholismo de Dumitru como atenuante, propuesto por la defensa

La defensa de Dumitru ha solicitado la aplicación una eximente por alcoholismo que actuara como atenuante y disminuir la pena impuesta. Sin embargo, la fiscal ha discrepado de que el condenado tenga un problema de adicciones con el alcohol, ya que no existen informes que así lo avalen.

Por su parte, la acusación particular ha afirmado que ni siquiera los padres de las víctimas llegaron a ver jamás al pedófilo ingerir bebidas de este tipo. Es así que los magistrados se han opuesto a aplicar la petición del letrado, ya que no han apreciado ni patologías psíquicas ni alteraciones en relación a los hechos que se han enjuiciado.