En la provincia de Hatay ha sido rescatado un niño de 12 años tras 260 horas bajo los escombros. Los rescatistas siguen buscando entre los escombros a pesar de que ya han pasado 10 días del terremoto que afectó a Turquía y Siria, el tiempo hace todavía más complicada la posibilidad de encontrar a una persona con vida. Hasta ahora el seísmo dejó un balance de 36.200 fallecidos en el territorio turco.
El rescate del niño sucede tras el hallazgo de la joven Aleyna Olmez
El nuevo rescate ha tenido lugar horas después del hallazgo de Aleyna Olmez. La joven de 17 años que fue hallada con vida el pasado jueves entre los escombros de un edificio situado en el distrito Kabayasi de la provincia turca de Kahramanmara.
Los servicios de emergencia llevan a cabo su trabajo en duras condiciones por las réplicas del seísmo.
El niño de 12 años es trasladado a un centro de salud
El niño identificado como Osman Halebiye ha sido traslado en ambulancia tras su rescate en el distrito de Ekinci. Por otro lado, el Ministerio del Interior de Turquía ha informado sobre un nuevo terremoto de magnitud 5,1 en la provincia de Hatay. Cabe destacar que sucedió a unos 6 kilómetros de Arsuz.
Una mujer de 29 años identificada como Neslihan Kilinc fue rescatada bajo los escombros de un edificio en la provincia de Kahramanmara. La joven llevaba 258 horas sepultada tras el terremoto del pasado 6 de febrero. Cabe destacar que en el territorio turco han sido afectadas 11 provincias por el seísmo y las constantes réplicas.
En la región turca afectada por los seísmos viven unas 14 millones de personas y el territorio se extiende por unos 100.000 kilómetros cuadrados. Más de 11.000 edificios se vinieron abajo y en su mayoría eran bloques de apartamentos, algo que dificulta todavía más las labores de los equipos de rescate porque se necesita maquinaria pesada y los fallecidos son numerosos.
La OMS advierte de una crisis sanitaria
Con cientos de cuerpos debajo de los escombros y la aparición de algunas enfermedades entre los supervivientes como la sarna, la Organización Mundial de la Salud ha advertido sobre el riesgo de una crisis sanitaria en Turquía. Un experto en enfermedades infecciosas llamado Alpay Azap habló de la importancia de enterrar los cuerpos de forma apropiada para evitar una pandemia en la región.
Algunos expertos turcos han advertido que el balance de fallecidos podría alcanzar los 155.000 muertos, aunque una empresa alemana de análisis de riesgos, Risklayer, determinó que el número de víctimas podría estar entre 90.000 y 75.000. Por otro lado, el Gobierno de Siria ha informado que las víctimas en el territorio bajo su control alcanzan las 1.414. Más de cien camiones con ayuda humanitaria de la ONU han ingresado al territorio sirio por dos pasos fronterizos con Turquía.