Los resultados de las elecciones de Israel han deslizado un probable regreso de Benjamín Netanyahu al poder. Desde 2019 en el país se han realizado cinco elecciones, sin embargo, los últimos comicios podrían marcar el fin del bloqueo político. El líder conservador ha alcanzado una victoria con entre 61 y 63 de los 120 diputados del Parlamento. Los sondeos reflejan una derrota de la coalición liderada por el centrista Yair Lapid.

La alta participación ha aumentado la representación de la ultraderecha en el Parlamento hasta un 150%. En las elecciones, Sionismo Religioso dio un salto histórico en tan un año de 6 a 14 o 15 parlamentarios. La lista del bloque a favor de Benjamín Netanyahu tiene un discurso ultranacionalista, racista y homófobo.

Los aliados de Netanyahu aumentan su participación en el Parlamento

Entre 30 y 31 escaños serán para el Likud, la formación conservadora de Benjamín Netanyahu. Las otras listas del bloque que apoyan al exprimer ministro representan a los judíos ultraortodoxos. Por otro lado, el bloque del actual Gobierno de Yair Lapid descendió a entre 51 y 58.

Sin embargo, el partido político del actual primer ministro tuvo un crecimiento importante. La lista del ministro de Defensa, Benny Gantz, redujo su presencia en el Parlamento de Israel de 11 a 13.

El discurso de Benjamín Netanyahu tras las elecciones

Los seguidores del líder del Likud se concentraron en el Centro Internacional de Convenciones de Jerusalén donde Benjamín Netanyahu salió a las tres de la madrugada a dar un discurso marcado por las promesas. El conservador también quiso calmar a los presentes ante el auge de su aliado el ultraderechista Sionismo Religioso.

El exprimer ministro israelí dijo que quería formar un Gobierno que se preocupara por todos los ciudadanos sin excepción. Benjamín Netanyahu hacía alusión con esas palabras a la minoría árabe que ha sido amenazada de forma reiterada en los discursos de Sionismo Religioso.

Benjamín Netanyahu promete un Gobierno sin 'debilidad'

El líder del Likud aseguró que los ciudadanos querían un Gobierno con fuerza y sin "debilidad" que les devolviera el orgullo nacional y el Estado judío. A pesar de los últimos sondeos, en la mañana el exprimer ministro se vio obligado a pedirle a sus seguidores que salieran a votar mientras repasaba los feudos donde había una participación modesta.

En su mensaje durante la mañana Netanyahu pidió a sus seguidores que votaran en contra del Gobierno de Yair Lapid y los Hermanos Musulmanes. Durante la tarde el exprimer ministro se puso a recorrer centros comerciales mientras advertía que vio a muchos de sus seguidores mientras la izquierda acudía a los centros electorales.