La primera de ministra de Finlandia Sanna Marin se ha defendido después que se filtrara un polémico vídeo donde la política aparece bailando y cantando en una fiesta privada junto a un grupo de amigos: “no tengo nada que ocultar" y niega haber consumido sustancias ilegales. La dirigente ha concedido una entrevista a una revista donde declaró que asistió a una celebración en un domicilio privado donde coincidió con algunas personalidades del país.

Sanna Marin ha admitido que ingirió algunas bebidas aunque niega haber consumido alguna sustancia ilegal.

Sin embargo, la política refirió que estaba enfadada porque los vídeos se habían publicado. La primera ministra finlandesa reconoció que estuvo en una fiesta con amigos celebrando ‘alocadamente’.

El test de sustancias ilegales y la postura de Sanna Marin

Hace unas horas atrás la dirigente finlandesa mostró su disposición para someterse al test de sustancias ilegales si fuera necesario con el fin de demostrar que no consumió nada ilegal durante la fiesta. Sanna Marin recordó que los cargos públicos los ocupan personas normales y con una vida corriente. La política ha referido que tenía una vida familiar con compromisos laborales y tiempo para disfrutar con sus amigos.

El comportamiento de la primera ministra de Finlandia y las críticas en el país

A pesar de las críticas, Sanna Marin refirió que seguirá siendo la misma y que esperaba que la sociedad lo aceptara.

La dirigente recordó que el país vivía en una democracia con libertades. La primera ministra de Finlandia ha sida criticado en el pasado por asistir a un evento del Orgullo gay.

Asimismo Sanne Marin fue cuestionada días atrás por asistir a un festival de ‘heavy metal’ vistiendo una chaqueta de cuero. No obstante, la política subrayó que las elecciones existían para que la sociedad decidiera sobre el tipo de políticos que querían al frente de los gobiernos.

La socialdemócrata de 36 años asumió el cargo en diciembre de 2019 y desde ese momento se convirtió en la primera ministra más joven del mundo.

El escándalo del año pasado en otra fiesta de la primera ministra de Finlandia

El año pasado se produjo otro escándalo en Finlandia después que la primera ministra se marchara a una fiesta con sus amigos y dejara su teléfono móvil oficial en su casa. La celebración en la discoteca se prolongó hasta las cuatro de la mañana. La socialdemócrata tuvo que disculparse públicamente pero deslizó que tenía su teléfono privado mientras disfrutaba en el local nocturno.

Recientemente la integrante del Partido Socialdemócrata finlandés reveló que se sometió a una prueba de sustancias ilegales y que el resultado llegaría la próxima semana.

En una comparecencia la líder aseguró que nunca las había consumido. Algunos medios locales han dejado entrever que el vídeo los asistentes gritan una frase que pudiera referirse al consumo de ciertas sustancias.