Una variante del SARS-CoV-2 apareció en el sudeste del Reino Unido y al parecer, tiene una capacidad de propagación un 70% más veloz que el virus anterior, situación que ha obligado a las autoridades inglesas a regresar al confinamiento de, al menos, 18 millones de ciudadanos y la paralización de viajes internacionales desde Londres, hacia el resto del mundo.

El confinamiento anunciado en el Reino Unido, tras la aparición de la nueva cepa del COVID-19, generó un caos vehicular en la frontera, especialmente de camiones cargados de alimentos, ante el creciente temor a un posible desabastecimiento de productos importados frescos.

Al respecto, el Primer Ministro inglés, Boris Johnson, envió un mensaje de calma a la población británica, tras señalar que el Reino Unido cuenta con pleno abastecimiento alimenticio y que no hay nada que temer durante estas Navidades.

Londres y el sudeste de Inglaterra se mantienen bajo confinamiento epidemiológico

El pasado fin de semana, Johnson informó que debido a la aparición de esta nueva cepa del Coronavirus, no le ha quedado otra alternativa que decretar un nuevo confinamiento en Londres y el sudeste de esta nación, como una única forma de evitar la la propagación del mortal virus, que ha duplicado el número de casos de contagio en menos de una semana.

Por su parte, el ministro de Salud, Matt Hancock, informó en los medios británicos que “la nueva cepa del coronavirus se encuentra fuera de control”, lo cual aumentó la alarma entre los ingleses por esta nueva gravedad que se suma a los difíciles momentos que han debido enfrentar este año 2020 por la pandemia de coronavirus.

Tras el anuncio de Hancock, miles de ciudadanos británicos y europeos que residen en Inglaterra se precipitaron rápidamente hacia los aeropuertos y las estaciones de trenes, en un intento de salir de esta zona del país, antes del confinamiento previsto por las autoridades gubernamentales para esta semana. Esta situación de pánico provocó gigantescos embotellamientos y la intervención de las autoridades.

Europa mantiene aislada a Gran Bretaña, tras la aparición de la nueva cepa del coronavirus

Mientras tanto, los países de Europa decidieron aislar a Inglaterra, tras el hallazgo de la nueva cepa y por el temor de que esta nueva variante del mortal virus arribe a sus territorios, lo cual agravaría la complicada situación epidemiológica que enfrentan en estos momentos.

Entre las naciones europeas que prohibieron esta semana la llegada de viajeros provenientes del Reino Unido, se encuentran: Alemania, Polonia, Bélgica, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Bulgaria, Austria, Malta, Rumania, Letonia, España, Rumania, Croacia, Holanda, Estonia y Lituania. Estos países suspendieron todas las conexiones aéreas procedentes de Gran Bretaña. Por otra parte, los ferries de pasajeros permanecen inmovilizados entre Inglaterra y Europa, en un intento de detener la propagación del coronavirus.