Como parte de su plan de desconfinamiento iniciado el 4 de mayo, este sábado Grecia habilitó el uso de más de 500 playas de sus costas, las cuales se vieron muy concurridas frente a la ola de calor reinante.

Según informa Infobae, la ida a los balnearios fue la primera incursión a un lugar público para muchas personas quienes, para hacerlo, debieron mantener estrictas medidas de distancia social. En muchas playas se impuso además la desinfección de las tumbonas, para lo cual los balnearios dotaron a su personal de herramientas acordes, además de mascarillas reglamentarias.

Plan de flexibilización de la cuarentena en Grecia

La apertura de las playas fue además, una de las muchas medidas impuestas por Grecia en el plan de flexibilización de la cuarentena por coronavirus y un guiño hacia el sector turístico que depende del funcionamiento de los balnearios para subsistir. Y coincidió con la primera ola de calor, por lo cual los griegos se volcaron en masa a la orilla del mar.

Sin embargo los bañistas, ávidos de sol y mar, tuvieron que respetar determinadas normas de distanciamiento social para hacer uso de los balnearios, teniendo en cuenta inclusive el espacio que debía haber entre sombrillas.

Según cita la fuente, sólo podía haber 40 personas por cada 1000 metros cuadrados, mientras que la distancia entre postes de sombrillas debía ser de 4 metros, y los toldos de las mismas no podían estar a menos de un metro una de otra.

Tales indicaciones fueron dadas a conocer por el Gobierno griego y publicadas en un manual.

En cuanto a las toallas que los bañistas colocan sobre la arena, las medidas de seguridad indican que debieron mantener una distancia de 1,5 metros entre una y otra.

Una esperada salida para todos los griegos

Así las cosas, en Alimos, una popular playa del sur de Atenas, hubo colas desde muy temprano para entrar.

Yannis Tentomas, un vecino de 70 años, dijo a Reuters que "venir a la playa era lo mejor para los ancianos, después de estar encerrados tanto tiempo".

Mientras tanto, en una playa de la localidad de Kavuri, cerca de la capital, un empleado dedicado a limpiar las tumbonas, explicó a Clarín que cada vez que se iba un bañista, debían pasar desinfectante.

El joven, de nombre Pedri Alatras, dijo que el trabajo resultó agotador ya que tuvo que usar guantes cuando el termómetro marcó casi 40 grados, pero que "estaban obligados a respetar las medidas".

El empleado comentó también que según las indicaciones del balneario, no está permitido que haya más de personas por sombrilla.

La situación de Grecia frente a la pandemia de coronavirus

Grecia inició un plan de desconfinamiento hace una semana, mientras registra unos 2.800 infectados por coronavirus en el país, con 160 muertes. Las medidas de salida de la cuarentena comenzada en el mes de marzo coinciden con las tomadas en otros países de Europa, que buscan reactivar sus alicaídas economías, mientras alivian las restricciones impuestas para frenar la pandemia de COVID-19.