Los días 3 y 4 de septiembre se llevó a cabo en la ciudad ecuatoriana de Quito, un encuentro regional convocado por el gobierno de Ecuador para abordar la crisis migratoria de Venezuela. Esta reunión fue convocada con la finalidad de que cada país, de acuerdo a su legislación y realidades, aportara información, opiniones y experiencias que permitan lograr una migración más ordenada.

Contó con el respaldo de ACNUR y la OIM

Dicho encuentro se convocó inicialmente para los días 17 y 18 de septiembre, sin embargo, se adelantó y fue celebrado los días 3 y 4 de septiembre de 2018.

Esto motivado al gran número de migrantes que han atravesado las fronteras de varios países de América latina, particularmente de Colombia, Ecuador y Perú. Junto a estos tres países que son los más afectados, también participaron Argentina, Brasil, Costa Rica, Chile, México, Panamá, Paraguay y Uruguay.

Además, dicha reunión contó con el apoyo de la Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional de Migraciones (OIM). Dichas organizaciones han señalado que desde el 2014 hasta la fecha alrededor de dos millones y medio venezolanos han salido de su país. Esto como consecuencia de la grave crisis económica y social por la cual atraviesa el país suramericano.

Protección de los derechos humanos

Los representantes de los gobiernos de 11 países que acudieron a la cita, recogieron en un documento las conclusiones de este encuentro. Los acuerdos de la declaración de Quito, buscan coordinar en una forma más articulada la crisis migratoria de los venezolanos en la región. Entre los aspectos más destacados están el hecho de tomar en consideración a los ciudadanos más vulnerables, tales como los niños y adolescentes, los adultos mayores, los discapacitados y los enfermos, al momento de acogerlos en cada país.

Así mismo, se plantea trabajar en conjunto para implementar medidas dirigidas a proteger los derechos humanos de los migrantes en cada país. Esto, promoviendo la cooperación entre los diferentes países, la asistencia humanitaria a los ciudadanos y facilitando el acceso a los mecanismos para regularizar su situación migratoria.

Además, de rechazar en todo momento la xenofobia y la discriminación por su condición migratoria.

Recibir a los ciudadanos con documentos vencidos

Dada la problemática de la tenencia y vigencia de los documentos de identidad y otros documentos necesarios para viajar,el documento exhorta al Gobierno de Venezuela para que tome las medidas oportunas para solucionar este problema. Así mismo, insta a cada país, de acuerdo a su legislación respectiva, a recibir a los ciudadanos aun con sus documentos vencidos.

Por otro lado, solicita reconocer la iniciativa de los estados que cooperan y de los diferentes organismos internacionales, de hecho, se plantea iniciar un programa regional, con el apoyo de ACNUR y la OIM.

En relación a esto, consideran que urge que la ayuda y los recursos a los países, se incrementen dado el elevado número de ciudadanos venezolanos que han emigrado hacia otros países de Latinoamérica. Además, exhortan al gobierno de Venezuela para que acepte la ayuda, tanto de los otros gobiernos de la región, como de las organizaciones internacionales, a fin de dar solución a esta problemática.