La alianza opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) anunció este lunes sus primeras acciones de la llamada "Hora cero" tras la realización de la consulta popular del 16 de julio. Según la oposición, en el plebiscito del domingo más de siete millones de venezolanos rechazaron la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el presidente del país, Nicolás Maduro.
Más presión para Maduro
Durante una rueda de prensa, la MUD anunció la convocatoria a un paro cívico de 24 horas para el jueves, como mecanismo de presión para detener la constituyente de Maduro. "Convocamos a todo el país a que este jueves asumamos en protesta masiva y sin violencia un paro cívico nacional activo de 24 horas, como mecanismo de presión y preparación para la escalada definitiva, que será la próxima semana, para enfrentar el fraude constituyente y lograr la restitución del orden constitucional", anunció el dirigente opositor y primer vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara.
Asimismo, adelantó que "el día miércoles anunciaremos preparativos para conformar un gobierno de unidad nacional".
Los anuncios se produjeron un día después de que la oposición celebrara una consulta popular que no contó con respaldo del Poder Electoral y en la cual participaron 7,5 millones de personas sobre un registro electoral de casi 20 millones de votantes.
¿Más presión para el chavismo?
El Gobierno venezolano ha insistido en restarle valor al plebiscito al considerarlo una "consulta interna" que no tiene sustento jurídico. Asimismo, desde la dirigencia chavista han acusado a la oposición de mentir sobre las cifras de participación. El mismo domingo 16 de julio, dirigentes oficialistas aseguraban que el proceso convocado por la oposición era un "fracaso" y que había poca afluencia de votantes, lo que contrasta con lo observado en la calle.
Los expresidentes Vicente Fox (México), Laura Chinchilla (Costa Rica), Miguel Ángel Rodríguez (Costa Rica), Andrés Pastrana (Colombia) y Jorge Quiroga (Bolivia) estuvieron en Venezuela como observadores del proceso. Consideraron que la alta participación de venezolanos que se expresaron por un cambio en el país sudamericano debe ser un llamado de atención para la comunidad internacional.
De hecho, el Gobierno mexicano ha reconocido la alta participación en la consulta popular que la oposición venezolana organizó. En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores expresó su deseo de que los resultados "sean escuchados y debidamente tomados en cuenta por las partes en la búsqueda de una solución negociada que les permita restaurar el orden democrático en ese país lo antes posible".
También la Cancillería de Canadá expresó su apoyo a los venezolanos que participaron en el plebiscito: "Los millones de personas que han tenido el valor de participar, a pesar de la cobarde violencia y la censura, han enviado una clara señal al Gobierno de Venezuela: los venezolanos quieren conservar los derechos fundamentales consagrados en su Constitución de 1999".
Amenazas de sanciones
La alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Federica Mogherini, habló este lunes sobre la posibilidad de aplicar sanciones al régimen de Venezuela si Maduro instala una Asamblea Constituyente.
"Creemos que sería útil si el Gobierno buscase gestos políticos para desescalar las tensiones, crear mejores condiciones para reanudar el trabajo hacia una solución pacífica negociada y suspender el proceso de hacer una Asamblea Constituyente", indicó.
Al referirse al resultado de la consulta popular de la oposición venezolana, dijo que "muestra que hay una voluntad del pueblo de Venezuela de tener una solución pacífica urgente a sus dificultades".
Por otra parte, a través de un comunicado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó a Maduro con fuertes sanciones si continúa adelante con su proceso constituyente. Enfatizó que "Estados Unidos no mirará de brazos cruzados mientras Venezuela se hunde”.
Advirtió, además: "Si el régimen de Maduro impone el 30 de julio su Asamblea Constituyente, Estados Unidos tomará medidas económicas rápidas y claras". Trump resaltó la importancia de la consulta llevada a cabo el domingo, pero lamentó que las "acciones fuertes y valientes" del pueblo venezolano "siguen siendo ignoradas por un mal líder que sueña con convertirse en dictador".
Maduro no cede
Este lunes, el sucesor del fallecido Hugo Chávez dijo que la convocatoria a la Asamblea Constituyente sigue en pie. "Así la convoco, a una constituyente por la independencia y soberanía", expresó. La semana pasada, el Presidente venezolano ya había reaccionado ante las amenazas de sanciones: "El imperialismo anda amenazándonos que si se da la Asamblea Nacional Constituyente ellos van a bloquear a Venezuela. ¿Bloquear a Venezuela? A Venezuela no la bloquea nadie, compadre".
En medio de esto, Maduro reiteró su llamado al diálogo político para lograr "un gran acuerdo nacional de paz". "A pesar de la insensatez de la oposición venezolana les ratifico mi llamado al diálogo por la paz, al diálogo político, mi disposición absoluta a que continúen las conversaciones que se han iniciado y a que eso fructifique en un gran acuerdo nacional de paz, de trabajo, de prosperidad", apuntó el mandatario, quien se considera "campeón mundial de la paz".