Según un estudio realizado teniendo en cuenta los rasgos clínicos del presidente de los Estados Unidos podría estar sufriendo un trastorno narcisista que se caracteriza por sentimientos de grandeza, que parece no sentir empatía por los demás y tiene una gran necesidad de ser admirados por aquellos que les rodean.
El estudio ha sido publicado en la revista Behavioral Psychology/ Psicología conductual, el Presidente Donald Trump sufre lo que se conoce como Trastorno de la Personalidad Narcisista (TPN).
Este estudio no está basado en un diagnóstico clínico sobre la personalidad de Donald Trump para lo cuál necesitarían una entrevista clínica en persona y otro tipo de pruebas, según explica Vicente E.
Caballo Manrique, catedrático del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada.
Por fin, se puede dar una explicación a las controvertidas acciones y polémicas declaraciones realizadas por el presidente de los Estados Unidos.
Pero, ¿Cuáles son los rasgos del Trastorno de la Personalidad Narcisista que parece sufrir el propio Donald Trump?
El TPN (Trastorno de personalidad narcisista). Según el manual "Diagnóstico y estadística de los trastornos mentales" explica que se caracteriza por una idea exagerada sobre la grandeza y la prepotencia, estamos ante una persona que exagera al extremo sus competencias y logros y espera ser conocido por las personas que lo rodean como alguien superior.
Son personas que tienen fantasías de poder, de éxito ilimitado, de brillantez...
Les encanta que los denominen con adjetivos como "fantástico", "impresionante", "genio", "especial" o "asombroso".
Por ejemplo, Trump se considera una persona especial y única que sólo puede ser valorada por personas que sean de status superior o tan especiales como lo es él.
Necesitan ser admirados de forma muy excesiva.
Son individuos que viven obsesionados por su propia personalidad y sobre lo que los demás piensan sobre ellos.
En el caso de Donald Trump, él necesita aparecer en la portada de la revista Time. Y es una persona algo desconcertante. Trump no es capaz de identificarse o de reconocer las necesidades y los sentimientos de las personas que le rodean, incluso puede llegar a ser violento o agresivo en la manera de comunicarse y puede llegar a mentir.
Donald Trump siempre pondrá por delante sus propios intereses que los de su país. Por el momento, ya lo ha demostrado en la cumbre del G-7.