En lo que va de semana, dos sentencias emitidas por el Tribunal Supremo de Justicia en Venezuela han roto el orden constitucional en el país, una situación que es denunciada por los diputados de la Asamblea Nacional como un “Golpe de Estado” mientras que los representantes del gobierno se escudan en el hecho de que dicho poder legislativo se encuentra en “desacato” tras juramentar a tres parlamentarios del estado Amazonas (zona sur de Venezuela).
Diversos líderes mundiales, se pronunciarán al respecto en su mayoría se solidarizan con los diputados opositores al gobierno de Nicolás Maduro, pero hay quienes abogan porque se dé una solución pacífica a toda la confusión que están viviendo los venezolanos.
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en Venezuela ha decidido otorgarle facultades extraordinarias al primer mandatario de ese país, al mismo tiempo que tomó para sí las funciones del poder legislativo. Esto rompe el equilibrio que debe tener cualquier nación que cuente con tres poderes públicos claramente establecidos.
Golpe rechazado
Estados Unidos fue uno de los primeros países en emitir un comunicado al conocerse la sentencia. "La ruptura de las normas democráticas y constitucionales daña enormemente las instituciones de Venezuela y niega a los venezolanos el derecho a dar forma a su futuro a través de sus representantes electos", dijo Mark Toner vocero del Departamento de Estado.
Por su parte dos países llamaron a consulta a sus embajadores en Venezuela.
Para el gobierno chileno la decisión del TSJ es de “suma preocupación”. Heraldo Muñoz, canciller de ese país destaca que "Esta situación nos lleva a consultar con los países amigos cómo proceder de ahora en adelante”. Chile fue uno de los 20 países que el pasado martes firmó la intención de llevar pasos concretos para ayudar a Venezuela.
"Condeno la ruptura de la democracia en Venezuela. Retiro de manera definitiva a mi embajador en ese país, América Latina es democrática. Es inaceptable lo que ocurre en Venezuela", refiere el mandatario peruano Pedro Pablo Kuczynski.
Solidaridades separadas
Brasil y Argentina, países que en su momento mostraron cercanías y un sólido respaldo al gobierno venezolano, no dejaron de mostrar su preocupación y rápidamente condenaron la acción del poder judicial venezolano.
"El gobierno brasileño repudia la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Venezuela que retiró de la Asamblea Nacional sus prerrogativas, en una clara ruptura del orden constitucional", sentencia la Cancillería en un comunicado.
Por su parte, el presidente de Argentina, Mauricio Macri sostuvo un encuentro con Lilian Tintori, esposa del político venezolano Leopoldo López, quien se encuentra tras las rejas desde el pasado año 2014. Tras esa reunión el jefe del ejecutivo argentino instó a “recomponer el orden democrático” al mismo tiempo que sentencia que la vía que debe tomar Venezuela para lograr solucionar la crisis es el diálogo.
En la región México y Colombia se mostraron más cautos en sus señalamientos.
El primero a través de un comunicado de la cancillería destacó que “la decisión del Tribunal Supremo de Venezuela atenta contra los principios y valores esenciales de la democracia representativa y la separación de poderes".
Por su parte el Gobierno de Colombia mostró “profunda preocupación”, pero al mismo tiempo abogó por una salida nacional a la profunda crisis.