El viernes 13 de octubre, 28 miembros en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, de 14 países europeos y miembros de los cuatro principales grupos políticos, firmaron una declaración escrita publicada en la web del Consejo de Europa, llamando respetuosamente al gobierno ruso a intervenir para ‘poner fin a las violaciones del derecho a la libertad religiosa de los miembros de las minorías en Rusia’.
La declaración presentada en el Consejo de Europa dice: ‘los evangélicos, los luteranos, los bautistas, los pentecostales, los metodistas, los presbiterianos, los musulmanes, los hindúes, los budistas, los cienciólogos y otros han sido blanco de ataques, con algunos de sus miembros condenados a prisión preventiva basados en la ley de extremismo de 2002, mientras que en realidad se les retiene simplemente por involucrarse en creencias y actividades religiosas pacíficas’.
Esta declaración, cuyos signatarios son miembros de parlamentos de España, Portugal, Italia, Reino Unido y otros 10 países, aparece en un contexto de fuerte discriminación religiosa en Rusia, donde las minorías religiosas sufren tratamientos ilegales por parte de algunas autoridades.
Recientemente, los Testigos de Jehová, quienes rechazan la violencia, han sido prohibidos como 'extremistas' por el Tribunal Supremo. Las protestas de defensores rusos de DDHH han aumentado en toda Rusia, ya que las discriminaciones son cada vez más injustas incluso hacia ciudadanos rusos. Hace pocas semanas, Lyudmila Alexeyeva, una conocida activista rusa de derechos humanos a quien Putin visitó personalmente en su 90 cumpleaños, ha publicado una carta abierta al presidente en la principal revista nacional, The Kommersant, secundada por 100 activistas rusos de DDHH que protestaron contra el trato injusto que reciben los cienciólogos en Rusia, tras el arresto de cinco de sus líderes por cargos espurios de 'extremismo', basados en una ley de extremismo de 2002, que, según los parlamentarios europeos: no proporciona una definición clara para el término extremismo, lo cual hace que prácticamente cualquier grupo o individuo sea vulnerable al acoso político y judicial’.
Iván Arjona, Director General de la Oficina Europea de la Iglesia de Scientology para Asuntos Públicos y Derechos Humanos, ha dado la bienvenida a la declaración presentada, declarando a los medios de comunicación que esta: ‘seguro que las distintas minorías religiosas en Rusia están agradecidas por el valor mostrado por estos 28 parlamentarios de 14 países, que estan reclamando la intervención del gobierno ruso ante las autoridades que están aplicando incorrectamente una ley cuyo espíritu era el de proteger a los ciudadanos, pero que en lugar de eso se usa para perpetrar una caza de brujas en pleno Estado de derecho en el Siglo XXI’.
La iniciativa contó con el apoyo del EIFRF, una ONG registrada en Francia y reconocida por la administración francesa como de 'interés general filantrópico', por el All Faiths Network y por la Fundación para la Mejora de la Vida.