En la última jornada de la UEFA Champions League, en el grupo H que definía el primer puesto, se vivió un hecho lamentable, polémico y repetido, que decantó en que los jugadores del PSG que enfrentaban al Estambul Basaksehin, se retirasen de la cancha acusando insultos agravantes por el color de piel, lo que obligó a las autoridades arbitrales a suspender el encuentro.

El partido se llevaba a cabo en el día de ayer en el estadio Parque de los Patricios, cuando los jugadores del PSG advirtieron comentarios racistas por parte del cuarto árbitro, y en conjunto con los jugadores del equipo rival, decidieron interrumpir lo que quedaba aún por disputarse, por decisión unánime.

La denuncia indicó que este arbitró vociferó comentarios con contenidos racistas contra Pierre Webó, ayudante técnico del conjunto turco, y al percibirse de manera notoria los insultos, puesto que al no haber aficionados en las gradas todo se escucha muy claro, se desató de manera inmediata la reacción de los jugadores y cuerpo técnico contra el asistente arbitral.

El árbitro en cuestión se trata del rumano Sebastian Colescu, quien originó un hecho sin precedentes en la historia de esta competición: la decisión colectiva por parte de los integrantes de ambos equipos, de repudiar un comentario racista. El racismo tiene lugar en los estadios europeos con bastante frecuencia, pero el reglamento no había contemplando la unanimidad de un rechazo.

Los comentarios de la polémica

El miembro del equipo técnico del equipo turco, Pierre Webó, fue quien recibió los insultos con contenido racial. El conocido ex jugador del Mallorca, y Osasuna, se le acercó al cuarto árbitro para protestar por una jugada, cuando recibió la expulsión por exceso. Pero esto no quedó ahí. Según denuncia Webó, el asistente arbitral le habría dicho “estás expulsado, negro”, lo que desató una furiosa reacción del ex jugador, quien desencajado gritaba “¿por qué me llamas negro?”, una y otra vez.

El entrenador del equipo turco, Okam Buruk, apoyó y fue más allá: “¡Lo has expulsado por negro!”, gritó enfrentando al árbitro cara a cara. Mbappé y Neymar fueron de los primeros que se sumaron al tumulto, exaltados contra la evidente reacción ante el supuesto comentario racista.

Pronunciamiento de la UEFA ante el comentario racial

Tras la medida inamovible por parte de los jugadores, rápidamente apareció la pregunta "¿qué va a resolver la UEFA?". Comenzó a cobrar fuerza la posibilidad de que ambos equipos fuesen sancionados con pérdida de puntos, o alguna multa económica. La mayor parte de la comunidad en el deporte, aficionados, periodistas, marketing y deportistas, expresan consenso en repudiar al racismo. Por lo tanto, generaba muchas expeditivas conocer cuál iba a ser la postura del la máxima institución del Fútbol europeo.

Alrededor de las 23 horas del martes, apareció el comunicado de UEFA expidiéndose ante los hechos. Allí se informó la reanudación del encuentro, desde el minuto 14, hoy miércoles desde las 18:55, dirigido por un equipo arbitral distinto.

Esta resolución permitirá completar las posiciones del grupo H, que ya tiene como clasificado al Leipzig quien derrotó ayer 3-2, y eliminó, al Manchester United. Resta por ver si la UEFA expide con alguna sanción, en caso de comprobarse, hacia el asistente arbitral.