La selección española de Fútbol vivió entre el 2000 y 2012 una era de ensueño en la que conquistaron dos Eurocopa y una Copa Mundial de la FIFA. Luis Aragonés y Vicente del Bosque le brindaron a la Roja una identidad y estilo de juego único, que los llevó a lo más alto del fútbol mundial. Con el pasar de los tiempos esto se fue diluyendo y la absoluta cayó en una especie de letargo que parece llegar a su fin de la mano del asturiano.

La RFEF le quiere cambiar la cara a la selección

Luego de ganar el Mundial en el año 2010 y la Euro en el 2012, algo cambió en España.

La senda por la que transitaba se perdió y comenzó a caer en un abismo. Su actuación en Brasil 2014 fue un fracaso estrepitoso, y se comenzaron a encender las alarmas sobre el posible fin de una era. Para Rusia 2018 se pensó que se habían tomado los correctivos, pero nada más lejos de la realidad.

La Federación comenzó a detectar ciertos problemillas internos, y su presidente, Luis Rubiales, buscó darle un vuelco a la situación. Pensando en cambiar el rumbo, decidió darle el timón a Luis Enrique, quien venía de vivir una época maravillosa con el Barcelona con quien lo ganó todo como entrenador.

Pero la decisión de colocar al asturiano al mando no solo se debió a lo deportivo, sino que también tenía el perfil que se necesitaba en la selección para poner orden en el vestuario, precisamente eso fue lo que el mandamás de la RFEF le exigió al director técnico al ser contratado.

Luis Enrique asumió el reto y tan pronto tuvo a sus convocados concentrados en la ciudad deportiva de las Rosas puso las reglas del juego bien en claro. Al principio se pensó que esto disgustaría a sus jugadores, pero con el tiempo se ha ido notando que las decisiones del míster son aplaudidas por los futbolistas.

Los cambios de Luis Enrique con los que busca mejorar el desempeño de la Roja

El debido uso del teléfono celular. Luis Enrique pidió a sus jugadores que no usaran el móvil durante las comidas y que en el vestuario solo sea usado para fotografías grupales, nada de comentar en redes sociales ni algo por el estilo. En cuanto a esto alguno de los jugadores comentaron que reconocían que estaban muy pendiente del uso de sus móviles.

Los seleccionadores que antecedieron a Luis Enrique permitieron que los futbolistas tomaran el control de muchas de las decisiones internas. Existía mucho relajo al respecto de las normativas, tenían mucho tiempo libre y disponían de sus móviles como y cuando quisieran.

En vista de todo esto el nuevo entrenador decidió que los entrenamientos serían durante la mañana y que en las tardes no tendrían salidas como venía a ser costumbre, y si llegaban a salir iba a ser en grupo, tal y como ocurrió cuando les organizó una actividad llamada “escape room