A pesar del abultado marcador de cuatro goles por uno que reflejó el luminoso del Camp Nou, el FC Barcelona no jugó su mejor partido ante la Roma en el encuentro de los cuartos de final de la UEFA Champions League.
Los culés se vieron bastante flojos a la hora del desarrollo del partido, varios fallos en la defensa y poca creación de ocasiones. Básicamente, fue ese tipo de partido en el cual no se sabe si fue que jugaron a otra velocidad o que simplemente el cansancio de haber perdido solamente un partido esta temporada se está empezando a percibir.
Sergio Busquets volvió a las canchas, pero aún le falta volver a tomar el ritmo que traía hace unas semanas, ya que este miércoles se contagió del mismo virus que tuvo todo el equipo y, de hecho, fue el primer cambio de Ernesto Valverde.
Sin embargo, no hay que restarle crédito al buen partido que hizo el conjunto italiano, el cual contó con varias ocasiones, cerró bien los espacios, no dejó surgir a Lionel Messi y se plantó de frente para hacer un partido digno de esta instancia.
Además, los romanos no pudieron contar con su cinco Radja Nainggolan para tener un mejor desempeño en la mitad de la cancha, a diferencia de los blaugranas, quienes recuperaron al suyo.
Sorpresivo protagonista
Una vez más, el autogol fue el principal protagonista del partido a favor del FC Barcelona, así como lo fue en un principio de temporada en varios partidos de Champions y de la propia Liga Santander.
El primero llegó tras una jugada armada entre Andrés Iniesta y Lionel Messi ya pasada la media hora de juego. Iniesta intentó juntarse con el argentino dentro del área para el último toque y, de mala fortuna, Danielle De Rossi intentó despejar el balón, pero terminó enviando el esférico en su propia puerta.
El segundo cayó al minuto 55 y esta vez fue el central Manolas Konstantino.
Messi sacó en corto un corner con Ivan Rakitic, hicieron una apred y quedó el croata solo en la raya de fondo para tirar famoso “busca pie” que Samuel Umtiti quería buscar pero fue el central, en dos tiempos, quien marcó el gol.
Ya el tercero y el cuarto llegaron por creación del Barcelona, que ya había tomado la confianza suficiente para buscarlo.
Uno fue de Gerard Piqué tras un rebote que dejó el arquero Allison después de un remate de Suárez, y el propio “Lucho” marcó el último (el primero de esta edición de la competencia) tras una pifia de un central romano.
Edin Dzeko fue quien dañó el panorama blaugrana antes del cuarto gol de los de casa tras anotar luego de un buen pase al centro del área. El delantero luchó contra la defensa culé y pudo sacar un buen remate que batió a Marc André Ter Stegen.
Ahora, esta llave se terminara de definir en suelo italiano pero todo apunta a que el Barcelona ya está en semifinales.