Normalmente cuando se llega a un acuerdo para traspasar a un futbolista entre dos clubs ya no hay nada que lo impida. Pero no es así, porque en el mundo del Fútbol ha habido casos de traspasos frustrados y sueños rotos debido a que el jugador no pasó con éxito la revisión de su nuevo equipo.
Estos son 7 de los casos más sonados en los que un fichaje se rompió en el último momento debido a la condición física del jugador.
Nunca sabremos si habrían triunfado en su nuevo equipo.
Kiko Narváez (Milán, año 2000)
El delantero fue fichado del Cádiz por el Atlético de Madrid en el año 1993, donde acabó triunfando y siendo recordado por su famosa celebración del arquero en cada gol que anotaba. Además, es muy querido por la afición colchonera ya que se quedó en el equipo cuando los rojiblancos bajaron inesperadamente a Segunda División.
Una vez que consiguió devolver al Atlético donde merecía estar, decidió que su tiempo allí había terminado. Era el año 2000 y su fichaje por el AC Milan estaba cerrado, pero unos problemas con la revisión médica frustraron su fichaje a uno de los clubs más grandes del mundo.
Se retiró en el año 2002 debido a las continuas lesiones.
Raúl Tamudo (Glasgow Rangers, 2000)
Una de las grandes bestias del FC Barcelona y el emblema y escudo del Espanyol. Con solo 19 años consiguió ascender con el filial y en el año 1996 fue cedido al Alavés. Después de varias cesiones más por fin se acomodó en el primer equipo y empezó a forjar su leyenda en el conjunto blanquiazul.
Pero una de las cosas que más se recuerdan de Tamudo es en la ocasión que decidió cambiar de rumbo y marcharse al Glasgow Rangers. La operación estaba cerrada pero en la revisión médica salieron unos inesperados problemas de rodilla por lo que se canceló el fichaje.
Gabi Milito (Real Madrid, 2003)
El jugador argentino era uno de los mejores centrales cuando las lesiones le respetaban.
Con solo 17 años debutó en el Independiente de Avellaneda y en tan solo 6 años llamó la atención del Real Madrid. El conjunto blanco pretendía que fuera el sucesor de Fernando Hierro y viendo su potencial decidieron pagar 3,5 millones de euros.
El gran problema fue que una vez en la capital del España Gabi Milito no superó las pruebas físicas debido a unos problemas graves de rodilla. Más tarde demostró en el Real Zaragoza que era uno de los mejores centrales del mundo y acabó jugando con el FC Barcelona desde el año 2007 al 2011.
Aly Cissokho (AC Milan, 2009)
El Milán decidió pagar 15 millones al Vitoria Setúbal para hacerse con los servicios del franco-senegalés pero en la revisión médica se descubrieron problemas en el maxilar inferior que le podrían provocar problemas de espalda.
El equipo italiano decidió no arriesgar.
Rodrigo Caio (Valencia, 2015)
Con solo 18 años el brasileño empezó a destacar con el Sao Paulo y con las inferiores de la canarinha. El Valencia se fijo en él para reforzar su equipo y pagó casi 13 millones por él. El problema fue que una vez en Valencia, los médicos le detectaron que aún tenía problemas debido a una lesión pasada. El conjunto ché canceló el fichaje.
Martín Cáceres (Trabzonspor, 2017)
Es uno de los casos más recientes. El uruguayo era agente libre y el Trabzonspor se interesó por su fichaje gratuito. Sin embargo, el ex del Barcelona y Juventus no pudo pasar las pruebas médicas por lo que el equipo turco decidió no llevar a cabo el fichaje.
Acabó fichando por el Southampton donde tampoco triunfó.
Jordan Amavi (Sevilla, 2017)
El último caso conocido es el Jordan Amavi. El joven francés de solo 23 años y con un excelente futuro jugaba en el Aston Villa hasta que el Sevilla ofreció 8 millones de euros para hacerse con sus servicios. Era un fichaje ilusionante pero el equipo hispalense no quiso arriesgar debido a los problemas descubiertos en la revisión médica.