A perro flaco, todos son pulgas. Eso deben pensar los madridistas a día de hoy. Por si no fuera poco con la derrota en Girona y las inmensas dudas sobre la confección de la plantilla, un ex madridista como Álvaro Morata se ha destapado con unas sorprendentes declaraciones que no dejan en buen lugar a su antiguo club. El canterano ha expresado su "desilusión" en "La Gazzeta dello Sport" por haber tenido que regresar al Real Madrid el pasado verano después de dos temporadas en la Juventus, dejando claro que, si por él hubiera sido, no habría regresado al club blanco.
Pero la rajada del madrileño no se quedó ahí, sino que tuvo quejas hacia el trato recibido, tanto antes de marcharse como al volver. Para Morata, la decisión de volver fue un error porque "me trataron como el niño que era antes de irme dos temporadas a Italia". Además, Morata explicó por qué tuvo que verse obligado a regresar: "Había acuerdos contractuales y tenía que volver. La desilusión fue enorme, era volver al punto de partida". Queda claro que el actual delantero del Chelsea no hubiera salido de la Juve si de él hubiese dependido, pero se vio obligado por la necesidad del Real Madrid que, recordemos, estaba pendiente de saber si iba a poder fichar o no de cara a la temporada 2016-2017.
Conte, clave en su llegada al Chelsea
Pero además de "rajar" sobre el trato en el Real Madrid, Morata también tuvo tiempo de aclarar por qué decidió aceptar la propuesta del Chelsea pese a tener otras muy interesantes sobre la mesa. Para Álvaro la clave reside en Antonio Conte, actual entrenador de los londinenses: "Vine aquí porque había un gran entrenador como Antonio Conte. Empezamos a hablar durante la primavera pasada y en verano aterricé en Londres". No hay que obviar que, antes de firmar por el Chelsea, Morata parecía muy cerca del Manchester United, ya que Mourinho estaba muy interesado en su contratación, pero los "Red Devils" acabaron rechazándolo en favor de Romelu Lukaku.
Morata, por supuesto, tiene claro que ahora mismo "respira el aire de un gran club y un gran entrenador", por lo que no está precisamente arrepentido de su decisión de marcharse del Real Madrid.
Después de muchos rumores sobre si el Real Madrid le dejó marchar o no, el propio ex futbolista del cuadro merengue fue el que decidió irse. Con estas declaraciones, Morata admite que fue él quien se quiso marchar, y que realmente su intención nunca fue abrirse hueco en el Real Madrid.