Uno de los mayores culebrones del verano ha finalizado. Parecía evidente que acabaría sucediendo, pero no terminaba de hacerse oficial. Ahora ya lo es: Diego Costa volverá al Atlético de Madrid a ponerse a las órdenes del entrenador que más le hizo crecer como futbolista. El equipo colchonero ha llegado a un acuerdo con el Chelsea para hacerse con los servicios del delantero por unas cifras que rondarán los 55 millones de euros.
No obstante, Costa no podrá vestirse con la rojiblanca hasta enero de 2018, ya que no puede ser inscrito aún. Este hecho, unido a los más de cien días que lleva sin disputar un partido, es el que más preocupa en la entidad madrileña.
Ahí tendrán un papel muy importante los preparadores físicos del club, con el 'profe' Ortega a la cabeza, que tendrán más de tres meses para la puesta a punto del futbolista.
Los colchoneros tienen motivos para soñar
La afición atlética sigue así de enhorabuena. A la inauguración hace tan solo unos días de su nuevo estadio, el imponente Wanda Metropolitano, se suma ahora la vuelta de uno de los jugadores más queridos y esperados por la afición. Si a esto le añadimos que a principios de este mes se hizo oficial la renovación del entrenador Diego Pablo Simeone hasta el año 2020, tenemos todos los ingredientes para volver a vivir otra etapa dorada de los rojiblancos.
La llegada de Diego Costa en enero no será la única.
Vitolo también estará disponible para el 'Cholo' para la segunda mitad de la temporada. Esto precipitará con casi total seguridad alguna salida de la plantilla, puesto que habría superpoblación de jugadores en la zona atacante.
Un culebrón que llega a su fin
Se pone así fin a una historia que parecía interminable. A lo largo del verano, Diego Costa se empeñó en hacer saber a todo el mundo que su equipo no contaba con él y que quería volver a su 'casa'.
Multitud de declaraciones donde lo dejaba muy claro e incluso vídeos en las redes sociales en los que aparecía con la camiseta colchonera, haciendo un claro guiño a su deseo de salir del equipo 'blue' dirección Madrid.
Antonio Conte ya había advertido a la directiva londinense que su relación con Costa no era la mejor y que no entraba en sus planes para la temporada.
Así, después de conceder un permiso al delantero para no realizar la pretemporada con el equipo, la reconciliación se preveía imposible. De hecho, se ha sabido que la intención del Chelsea era que el ariete se ejercitara con el equipo filial con el objetivo de no coincidir con el entrenador italiano, algo que, obviamente, no iba a aceptar Diego Costa.