Es de sobra conocida la situación de tensión máxima que se vive en los países asiáticos debido al comportamiento de Corea del Norte. Pues mientras se esquivan misiles y demás, el presidente de la vecina del sur, Moon Jae-in, ha sugerido que un bloque de países del nordeste de Asia sean la sede del Mundial de Fútbol que tendrá lugar en el 2030.
La idea de Moon incluiría entre esos países anfitriones a Cora del Norte, como una forma de conseguir la pacificación en la región. Esta sugerencia tuvo su nacimiento en la final de la Copa del Mundo sub 20 que se celebró en Corea del Sur.
Allí, Moon Jae-in, se reunió con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. Mientras Inglaterra derrotaba a Venezuela en la final por 0-1, Moon "tanteaba" el terreno para lograr ese ansiado Mundial de la paz. En palabras del propio presidente surcoreano:
"Pienso que un Mundial con sede en Asia ayudaría a promover la paz en la región, pues una organización conjunta de los países del nordeste asiático, incluyendo a Corea del Norte, sería maravilloso." Dichas palabras fueron transmitidas a la prensa por su portavoz, Park Soo-hyun.
¿Cuál fue la reacción de Infantino ante tal proposición? Pues tuvo sus dudas, expuso que el hipotético caso de una Copa del Mundo de la FIFA en tierras asiáticas sería peligroso y plagado de dificultades.
Pero, también señaló que es una idea que promueve unos valores muy poderosos a la comunidad. La idea irá cogiendo forma con el paso de los años y podremos saber más sobre esa Copa Mundial de Naciones del año 2030.
Por otro lado, Gianni Infantino se ofreció a plantear la posibilidad de dicho Mundial a otros países del nordeste de Asia, comenzando en primera instancia por China y su presidente Xi Jinping, con quien mantiene una relación bastante buena y cercana.
El primer paso es convencer a China, si se logra entonces otros países caerán por efecto dominó.
El principal problema de dicha candidatura asiática es Uruguay. ¿Por qué Uruguay? Pues porque la primera Copa del Mundo se celebró en territorio 'charrúa', y en el año 2030 se cumplirían 100 años de ese primer Mundial. Por ello, Argentina y Uruguay han presentado su candidatura para albergar el Mundial del 2030 de manera conjunta, al igual que Corea del Sur y Japón en el año 2002, Mundial fatídico para los intereses de España y ese maldito banderín erguido.
En definitiva, el "Mundial de la Paz" podría ser posible en un futuro y esperemos que, si se celebra, sirva de algo. ¿Fútbol entre misiles?
