Tras más de mes y medio de intensos rumores y negociaciones, finalmente en Mercedes se han decantado por Valtteri Bottas para que sea su nuevo piloto. Y es que, tras el campeonato conseguido y la posterior retirada de Nico Rosberg a principios del pasado mes de diciembre, en la fábrica de Brackley tenían ahora la dura tarea de buscar a alguien a la altura, donde sonaron nombres como Pascal Wehrlein, Sebastian Vettel o Fernando Alonso como su mayor y a la vez más complicado deseo.
Bottas llega procedente de Williams donde fue piloto de desarrollo para debutar allí en 2013, siendo esa su quinta temporada en la Fórmula 1.
Hasta el momento, consiguió nueve podios consagrándose como uno de los grandes talentos de la parrilla. La presentación tuvo lugar en la sede del equipo a través de un vídeo-directo en YouTube, acompañado de su nuevo jefe Toto Wolff y demás personal de la fábrica: "Tengo ganas de empezar a trabajar; con Lewis seremos una pareja fuerte. Es muy rápido, es una gran referencia para mí. Estoy seguro de que podremos trabajar como equipo y ayudar al equipo tanto como podamos y que consigamos otro título".
Massa regresa a Williams y Wehrlein llega a Sauber
Con ello, en Williams incorporan de nuevo a Felipe Massa que había anunciado en un primer momento su retirada, aportando la experiencia que en Groove necesitan y siendo compañero de un debutante como Lance Stroll, canadiense de 18 años.
Así, el brasileño comenta que su regreso es sólo por este equipo: “Mi intención siempre fue correr en alguna parte, ya que todavía tengo la pasión por correr y competir. También tengo un gran cariño a Williams, ya que he disfrutado de los últimos tres años con el equipo y, por tanto, volver para ayudar a dar estabilidad y experiencia para manejar las cosas en 2017 era algo bueno que hacer.
Tengo pasión por las carreras, por competir y por luchar en la pista. Mi regreso no es ver la Fórmula 1 como la mejor opción, sino por ver el papel en Williams. No habría vuelto para ningún otro equipo”, explicó tras su confirmación.
Por su parte, otro de los favoritos (con el apoyo de la propia Mercedes) para suplir a Rosberg era Pascal Wehrlein, pero su juventud jugó en su contra y finalmente termina saliendo del equipo Manor, y sus graves problemas financieros, para recalar en Sauber teniendo de compañero al sueco Marcus Ericsson.