Hablar de Woody Allen es hablar de uno de los mayores directores de Cine que existen en nuestra época. Hablar de Woody Allen también es hablar de su relación con Mia Farrow, una parte de su vida privada que salió a la luz y que no le ha traído muy buenos momentos. Pero ¿que hay detrás de ese hombre bajito, con el pelo blanco y gafas? Como hoy es su cumpleaños, continuación se comentan algunas curiosidades del actor.
Allan Stewart
Es así como se llamaba realmente el director de cine, pero decidió cambiarse el nombre en honor a uno de sus ídolos: Woody Herman.
Poco estudioso
Woody Allen fue un joven al que los estudios no le motivaban mucho. En sus estudios primarios estuvo en una escuela hebrea y, posteriormente, en una escuela pública donde estaba más dedicado al béisbol que a estudiar. Esto no cambió mucho en la universidad de Nueva York, ya que solo estuvo un semestre.
Vida personal
El director de cine habla francés y es vegetariano.
Antes de cineasta, cómico
Cuando tenía 15 años comenzó a escribir chistes para la columna de un periódico local. Fueron publicados de forma anónima en el Mirror y en el New York Post. Tal fue su éxito que fue invitado a participar en el Programa de Escritores de la NBC en 1955, ganando unos 25 dólares semanales.
No le gustan las nuevas tecnologías
Woody Allen ha reconocido en más de una ocasión que no tiene ordenador; que prefiere escribir con su vieja máquina de escribir que le costó 40 dólares. Lo que sí tiene es teléfono móvil, pero solo lo utiliza para hablar con sus hijas y escuchar música, otra de sus grandes pasiones.
Anhedonia
Este iba a ser el verdadero título de 'Annie Hall', que significa la incapacidad para sentir placer según la RAE. Así, la película, que se iba a centrar en recorrer y explorar la vida de un personaje principal sin centrarse en ningún relación, pasó a ser una de las comedias románticas más conocidas e importantes del cine.
Faceta musical
Cuando Woody Allen era pequeño aprendió a tocar el violín y, más tarde, el clarinete. Actualmente tiene una banda de jazz llamada 'The News Orleans' con la que suele hacer conciertos en lugares públicos.
Venecia
Este lugar de Italia es uno de sus sitios favoritos del mundo, por ello cuando el teatro Le Fenice ardió en llamas en 1996, Woody Allen ayudó a su reconstrucción.
Muy estricto con la puesta en escena
No deja que nadie entre al set del rodaje hasta que, tras la reunión con su director de fotografía, la iluminación está intacta. Pero, a pesar de esto, no sigue un guión técnico concreto ni un rodaje exhausto.
Películas favoritas
Como todo buen fanático del cine tiene cuatro películas predilectas: 'La rosa púrpura de El Cairo', 'Memorias de un seductor', 'Ciudadano Kane' y 'Match Point'.
Premios Oscar
Tiene el récord de nominaciones en los Oscar a mejor guión original. Concretamente, ha sido nominado en 16 ocasiones.
Traducciones absurdas
En los títulos de sus películas, al traducirlas al extranjero, se producían cambios bastante absurdos que al director no les gustaba mucho. Por ejemplo, su película 'Love and Death' fue traducida en España como 'La última noche de Boris Grushenko' o la película de 'El dormilón' fue traducida en Francia como 'Woody y sus robots'. Por ello, el cineasta decidió crear una cláusula nueva en su contrato con United Artist para que los títulos de sus películas no sufrieran ningún cambio.
No ve sus películas al terminarlas
Más de una vez ha comentado que no consigue estar contento con el trabajo final de sus propias películas, por lo que no las ve.
De hecho, tras terminar de grabar la película 'Manhattan', quedó tan decepcionado que pidió a la productora que no la estrenaran, llegando incluso a ofrecer grabar una nueva película totalmente gratis.
Miedos y fobias
Woody Allen no soporta las arañas ni ningún insecto en general. También tiene pánico a la muerte y le agobian los sitios con mucha gente. También tiene cierto temor a los baños de los hoteles y a las alturas.
Manías en el rodaje
Para la grabación de sus películas tiene un calendario totalmente estricto. Woody Allen solo graba durante los meses de octubre a diciembre para montar la misma durante la Navidad. A partir de enero, grabar de nuevo las tomas que no le gustan o nuevas escenas durante unas seis semanas. Así, la película está lista para su estreno a partir de mayo y en verano escribe un nuevo guión. Y así sucesivamente.