Nunca se había tenido en cuenta la posibilidad de un tsunami de grandes magnitudes en las costas de Andalucía. Sin embargo, en un estudio reciente llevado a cabo por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha puesto de manifiesto que esta situación es más probable de lo que cualquiera puede pensar. Así lo ha demostrado el propio CSIC en una investigación que ha llevado a cabo y que señala que es necesaria una revaluación de los sistemas de detección.

La falla de Averroes tiene más posibilidades de generar tsunamis de lo que se pensaba

El CSIC ha puesto el foco de su atención en la falla de Averroes, situada en el mar de Alborán. Se trata de una falla de salto en dirección de 5'4 metros en vertical y, según la investigación publicada en una conocida revista científica, Ferran Estrada, experto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, sostiene que se puede dar en ella un terremoto que alcance el nivel 7 en la escala Richter. Un seísmo que podría tener consecuencias devastadoras en las costas aledañas a donde se encuentra la falla. Y lo podría hacer en un período corto de tiempo.

Las olas gigantes irían hacia Andalucía y el norte de Marruecos y llegarían a tierra en poco tiempo

Tras estudiarse los posibles seísmos que ha provocado la falla de Averroes en los últimos 124.000 años, los investigadores del CSIC creen que el último terremoto provocado por esta sucedió en torno al año 365. Sin embargo, han estudiado cuáles podrían ser las consecuencias de un maremoto en esta zona y sostienen que las olas gigantes irían en dos direcciones: por un lado, a las costas de Andalucía y, por otro, al norte de Marruecos.

También señalan que alcanzarían una altitud considerable (llegando a los seis metros) y llegarían a zonas costeras entre 21 y 35 minutos, un período bastante corto si no se detecta a tiempo.

El CSIC sugiere que el sistema de alertas tempranas de estos fenómenos debe ser reconsiderado

Es así que Ferran Estrada concluye que un tsunami representa una amenaza para las costas de Andalucía y que las consecuencias tanto medioambientales como en infraestructuras serían devastadoras.

Por su parte, añade que los sistemas de detección que a día de hoy existen en la región serían insuficientes para adelantarse al fenómeno, más si cabe con la velocidad con el que este llegaría a tierra firme.

El experto del CSIC añade que es necesaria una revaluación de los sistemas de alerta temprana que se amolden a este riesgo que existiría en el sur peninsular a causa de la falla de Averroes, de la que en un principio se pensaba que no podía provocar seísmos al ser una falla de salto en dirección, pero tras ser estudiada de forma pormenorizada existen más posibilidades de las que se creía.