Científicos de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona y de Zaragoza han llevado a cabo investigaciones acerca de la primera ola de la pandemia, y es que si el confinamiento se hubiera decretado una semana antes, el índice de vidas que se podrían haber salvado, eran aproximadamente unas 23.000 en toda España.

Por otra parte, el estudio ha sido dirigido por el físico del Departamento de Ingeniería Informática y Matemática de la (URV) Álex Arenas, quien precisamente afirma que su equipo de investigación derivó el año pasado, cuatro informes al ministro de Sanidad a través del epidemiólogo Miguel Hernán, quien se encargó de asesorar al Gobierno en la primera ola del COVID-19.

Así pues, a partir de estos informes, el Presidente Pedro Sánchez tomó medidas para llevar a cabo el confinamiento total, dos semanas tarde como mínimo.

Los científicos explican cual fue el principal problema a partir de los estudios realizados

Asimismo, el principal problema fue el "retraso sustancial" que se se dio entre la exposición del virus y la notificación de los casos, con un promedio de 15 días de retraso. "Un retraso tan pronunciado dificulta una evaluación real de la situación epidemiológica y, por lo tanto, impide un manejo de la respuesta", continúan investigando.

Es por ello que los científicos analizaron la velocidad de propagación del virus llevando a una reconstrucción de los tiempos de exposición desde que existe una infección hasta que se la detecta.

A partir de este análisis, los científicos han podido observar una reducción en la velocidad de propagación precisamente antes del confinamiento. Así pues, desde la investigación explican que esto se debe posiblemente, a que las medidas restrictivas que ya se habían llevado a cabo en ciudades autónomas, concienciaron a la población sobre la gravedad de la situación.

Otro detalle que muestra el informe, es el aumento de las búsquedas en Google relacionadas con el COVID-19 a partir del 9 de marzo.

Por otro lado, desde el estudio publicado en Medrxiv aseguran que cuando se decretó el confinamiento el 15 de marzo, el país ya había alcanzado el pico máximo de contagios. Por lo que cuando el 28 de marzo se cerraron toda la actividad económica no esencial, ya hacían mas de 10 días que se había alcanzado ese número en la mayoría de las comunidades autónomas.

Los científicos también proponen otra hipótesis sobre su investigación, y es precisamente lo que habría pasado si en lugar del 15 de marzo el aislamiento se hubiera impuesto una semana después. La respuesta a esto viene de la mano con los cálculos de los investigadores, y es que determinan que el fallecimiento por el Coronavirus conllevaría a un número total de 120.000.

Álex Arenas da su conclusión tras las investigaciones llevadas a cabo

De este modo, el físico concluye en su análisis retrospectivo de la primera ola de COVID-19 en España, y asegura que si se hubiese adelantado el cierre siete días antes, el número de muertos por coronavirus habría descendido.

Por otro lado, las muertes hubieran sido más, es decir, aproximadamente unas 120.000, si el confinamiento se hubiera llevado a cabo siete días después. No obstante, aclara Álex Arenas, que "los tiempos son clave en esta epidemia, y hay que ser proactivos siempre".