La teoría de universos paralelos infinitos no es nada nueva, pero que en algunos casos, en estos universos paralelos el tiempo vaya hacia atrás, sí es una novedad.

Hace un aproximadamente año, en un estudio realizado en la Universidad de Washington, un grupo de científicos determinaron que el futuro resultado de una partícula también cambia su estado inicial. Es decir, que las partículas cambian su estado debido al conocimiento del científico, lo que sugiere que en el mundo cuántico, el tiempo podría ir tanto hacia delante como hacia atrás.

Estos científicos, físicos liderados por Kater Murch, comprobaron esta teoría mediante mediciones con una serie de dispositivos, dando como resultado, que el tiempo cuántico se dirige tanto hacia atrás como hacia delante, mientras que el mundo clásico sólo se ejecuta el tiempo hacia delante.

Actualmente, investigadores del Instituto de Tecnología de California y Massachusetts, han dado con una nueva teoría que indica que este fenómeno podría darse bajo una base de principios físicos más simples que los utilizados con anterioridad por la universidad de Washington.

La clave de esta teoría es la afirmación de que la dirección en la que fluye el tiempo no es realmente importante, ya que se comportan de acuerdo con las leyes físicas conocidas.

Nuestro concepto de tiempo es que fluye hacia delante, pero eso no significa que no puede ir hacia atrás también.

El significado de estas 2 teorías es que podría existir un universo paralelo en el que todos los acontecimientos pasados desde nuestra perspectiva en realidad están por ocurrir en el futuro.

Pero ¿cómo funcionaría esto desde un punto de vista práctico?, ¿es posible que un futuro a corto o medio plazo, las leyes físicas que conocemos actualmente queden obsoletas? Aunque es poco probable que alguna vez experimentemos un universo así nosotros mismos, la posibilidad de lo que podría ser, requiere una interesante reflexión. Aunque no debemos olvidar que las teorías, teorías son; falta poder demostrarlas.