Que nadie se deje engañar por el inocente y angelical rostro de la pequeña que aparece en la fotografía, pues lejos de ser lo que aparenta, esta niña es en realidad una depredadora sin compasión. Hoy, una vez más y siendo ya costumbre en esta columna, vamos a conocer la historia de Natsumi Tsuji, una asesina de tan sólo 11 años de edad.

Natsumi Tsuji, también conocida como Nevada tan, nació el 12 de noviembre de 1992 en Sasebo, Nagasaki (Japón). Natsumi era una chica normal hasta que se volvió adicta a las películas de violencia extrema, entre sus favoritas estaba Battle Royal.

Para seguir con su faceta de chica adicta al gore, Natsumi creó un blog en internet dedicado a la temática de terror. Con el paso del tiempo, fue ganando fama entre todos aquellos que compartían la afición de Natsumi por la sangre, convirtiéndose así en un referente en la red. Al poco,la actitud adorable de Natsumi cambió para siempre.

Satomi Miratai era la mejor amiga de Natsumi, hasta que un día tuvieron el típico conflicto entre niños que tan siquiera llegan a la adolescencia. Mientras se llevaba a cabo la disputa, Satomi le recriminó a Natsumi que ella era mucho más popular, esta afirmación, hizo que Natsumi entrara en un abismo de rabia descontrolada.

Un mes después de ese ataque, la clase de Natsumi se reunió en el patio del colegio para hacerse la típica fotografía donde todos los alumnos están presentes.

Horas después Natsumi invitó a Satomi a jugar a un juego en el que debía vendarse los ojos. Aprovechando que Satomi se encontraba a ciegas, Natsumi aprovechó para degollarla de una forma cruel con un cúter. Cuando la policía encontró el cuerpo, tenía la garganta destrozada y los brazos rajados de arriba abajo.

Una vez ingresada en el penal, fue visitada por psiquiatras infantiles casi a diario, todos ellos coincidían en que "laniña era mentalmente sana".

Desde que este crimen se hizo famoso, Natsumi acumúla una legión de fans por todo el mundo, los cuales le rinden homenajes a través de dibujos de todo tipo. En 2013, Natsumi fue puesta en libertad, hoy, disfruta de sus 24 años.