Sobre las 18:00, un niño de 12 años y sus tres amigos bajaron a jugar a la zona común de una urbanización en Estepona. En ese momento, un hombre de 38 años les gritó que dejaran de jugar a fútbol. Al individuo le molestaba el ruido que hacían los menores. La madre de la víctima afirmó que el agresor estaba acostumbrado a regañarlos y que ellos se marcharan del lugar. Sin embargo, en esta ocasión la actitud de la víctima y sus compañeros fue completamente distinta, algo que desembocó la ira del vecino.

Los niños hicieron caso omiso a la advertencia del hombre

Tras los gritos del hombre para que dejaran de jugar, el niño les dijo a sus amigos que no le hicieran caso al individuo porque en la urbanización estaba permitido jugar hasta las nueve de la noche. Acto seguido, el hombre se acercó al menor para preguntarle en tono intimidante si él era “el más chulo del barrio”.

El menor de 12 años solo se limitó a pedirle a uno de sus amigos que grabara con el móvil mientras él se cruzaba de brazos ante el hombre. El otro niño pudo activar la cámara de su teléfono y consiguió captar el momento en el que el individuo se acercaba al grupo y le lanzaba un puñetazo que impactó en el pómulo izquierdo de la víctima.

En la secuencia de imágenes se observa cómo la cabeza del menor se mueve hacia atrás tras el impacto. Posteriormente, el niño cayó inconsciente contra un muro en el que estaban apoyados el resto de los menores. Una ambulancia y la Policía acudieron al lugar de los hechos.

El hombre habría huido del lugar. Los agentes de la Policía no encontraron al individuo en la urbanización de Estepona.

Fuentes policiales informaron que existía un atestado tras el incidente y que todavía no habían arrestado al presunto autor de los hechos.

El menor estuvo inconsciente varios minutos

El niño estuvo inconsciente varios minutos, pero finalmente recobró el conocimiento. Los facultativos sanitarios atendieron al niño y lo trasladaron al Hospital Costa del Sol para realizar su valoración.

Los exámenes de los médicos determinaron que la víctima presentaba hematomas en la cara y dolor al abrir la boca.

Después que recibió el alta hospitalaria, el niño tuvo que regresar al hospital porque sentía náuseas y mareos. Por eso, un médico le prescribió un analgésico. Por otro lado, ahora el menor afirma que ve al hombre en todas partes. Incluso el menor sueña que el individuo lo persigue para volver a pegarle y debe medicarse por la ansiedad.

La madre del niño habló del presunto autor de los hechos

Tras la agresión, la madre del niño comentó que todos le tenían miedo al hombre por su comportamiento “conflictivo”. La mujer dijo que en varias ocasiones había intentado hacer entender al agresor que los niños tenían derecho a jugar. También recordó que el presunto autor de los hechos habría rajado el balón con una navaja delante de los menores hace unas semanas.