En Elche, la Policía Nacional detuvo a cinco personas por presuntamente engañar a trabajadores de un chiringuito en Los Arenales del Sol. Los sospechosos les pedían a sus trabajadores que tomaran unos comprimidos que les suministraban asegurando que eran unas vitaminas que los iban a ayudar a tener más vitalidad en su trabajo. Sin embargo, realmente eran anabolizantes.

La denuncia de una empleada alertó a la Policía Nacional

Los agentes de la Policía Nacional comenzaron a investigar después que una empleada alertó que el pasado verano fue contratada por el chiringuito, y que desde el principio de la relación laboral uno de los encargados del establecimiento le ofreció unos comprimidos.

El sospechoso presuntamente le dijo a la mujer que eran unas vitaminas que la mayoría de los empleados tomaba.

Durante el verano, la mujer comenzó a sentir pérdida de apetito, cabello y peso. También tenía más agresividad y voz más grave. Por otro lado, el resto de los afectados comentaron que habían sufrido mareos, sangrados nasales y desmayos.

Una de las empleadas tuvo que ser operada por perforación estomacal

El pasado mes de septiembre, la empleada que denunció los hechos tuvo que acudir a un centro de salud por un fuerte dolor en la zona abdominal. Posteriormente, el equipo médico tuvo que someter a la paciente a una intervención quirúrgica porque había sufrido una perforación estomacal.

Los especialistas le explicaron a la víctima que su estado era compatible con el de una persona que consumía anabolizantes.

La mujer denunció los hechos ante la Policía Nacional. La víctima les explicó a los agentes que varios empleados estaban afectados por consumir las supuestas vitaminas, incluido su hijo, quien estaba trabajando en el chiringuito.

La institución armada abrió unas pesquisas que finalmente desembocaron en el arresto de cinco personas, entre ellas el dueño del local, una cocinera y dos encargados.

Los detenidos les suministraban los anabolizantes bajo amenaza

Supuestamente, los dos encargados del chiringuito les administraban las presuntas vitaminas a los empleados “bajo amenaza de despido” si se negaban a tomarlas.

Los agentes de la Policía Nacional acudieron al establecimiento en la zona costera de Arenales del Sol, donde consiguieron intervenir más de 100 comprimidos de anabolizantes.

Los agentes también encontraron una nave industrial relacionada con el dueño del local, donde encontraron más anabolizantes. La Policía Nacional le comunicó los hechos al Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Elche. Por otro lado, los comprimidos fueron enviados a la Agencia Española del Medicamento para su correspondiente análisis. Los detenidos han sido acusados por lesiones, un delito contra la salud pública y contra los derechos de los empleados.