Un niño de 2 años falleció tras atragantarse con un trozo de pan en una guardería de Valencia. El incidente se produjo el pasado lunes sobre las cuatro de la tarde. Sin embargo, el menor falleció el pasado miércoles en el Hospital La Fe. El pequeño estaba conectado a un respirador ya que se encontraba en estado de muerte cerebral. Según ha trascendido, sus padres quieren donar los órganos para otros niños que pueden necesitar trasplantes.
El niño masticó el pan con aceite y sal
El pasado lunes, poco antes de que su madre acudiera a recogerlo a la guardería en Valencia, el niño de 2 años masticó el pan con aceite y sal.
Posteriormente el pequeño pidió agua a su profesora y se sacó la comida de la boca. Unos segundos después, el pequeño se desplomó en el suelo y una de las cuidadoras lo levantó para darle agua.
En ese momento, las cuidadoras se percataron de que el niño no estaba bien. Posteriormente dieron el aviso a los servicios de emergencia y a la progenitora de la víctima. Las mujeres intentaron reanimar al menor y lo pusieron en posición lateral de seguridad.
El pequeño comenzó a expulsar sangre por la boca y la nariz
Mientras las cuidadoras lo atendían, el niño comenzó a expulsar sangre por la boca y la nariz. En un primer momento, ellas pensaron que el menor se había mordido el labio, pero posteriormente descartaron esa posibilidad.
Acto seguido, notaron que la víctima respiraba con mucha dificultad. Cuando las cuidadoras mojaron la frente y la nuca del niño, éste comenzó a llorar y posteriormente se quedó inconsciente, pero visiblemente pálido. Tras recibir el aviso, varias patrullas de la Policía Local de Valencia y el SAMU acudieron al lugar de los hechos.
Los agentes de la Policía Local de Valencia llegaron a la guardería y comprobaron que el pequeño apenas podía respirar. Uno de los policías intentó aplicar un masaje al niño para que expulsara el pan, ya que tenía obstruida la tráquea. Posteriormente los facultativos del SAMU realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar al niño durante al menos 20 minutos.
El equipo médico logró recuperar los signos vitales del niño
Finalmente los facultativos sanitarios del SAMU lograron recuperar los signos vitales del niño. Acto seguido, el menor fue trasladado en una ambulancia hasta el Hospital La Fe. Una patrulla de la Policía Local de Valencia abrió paso a la ambulancia para que la víctima llegara lo antes posible al centro de salud.
Por eso, la ambulancia llegó en pocos minutos al centro de salud. A partir de ese momento, el pequeño se encontraba en el servicio de urgencias del Hospital La Fe hasta su fallecimiento el pasado miércoles. Los agentes de la Policía Local de Valencia también tomaron declaración a las tres cuidadoras de la guardería. La institución armada abrió una investigación para esclarecer los hechos.