El pasado domingo, cuatro jóvenes de 25, 15, 15 y 13 años perdieron la vida tras un choque frontolateral al abandonar las fiestas de Collado Villalba en Madrid en un pequeño Toyota Auris. Los primeros datos que baraja la Guardia Civil Tráfico no apuntan a un exceso de velocidad, sino a una pequeña falta de atención que desembocó en el accidente. Todas las víctimas mortales eran de Moralzarzal.

Los agentes investigan si la conductora había pasado la noche de fiestas

La Guardia Civil de Tráfico investiga si la conductora también había pasado la noche de fiestas y se quedó dormida mientras estaba al volante.

Por eso, los análisis de las muestras de sangre recogidas determinarán si la joven de 25 años había consumido algún tipo de sustancia o alcohol. El accidente ocurrió en un tramo de la M-608, concretamente en el punto kilométrico 38 que une a Collado Villalba y Moralzarzal. En esa parte de la vía existen varias curvas con el arcén bastante estrecho.

Una fuente de la investigación afirmó que los giros en el punto kilométrico 38 no eran problemáticos “ni puntos negros”.

Sin embargo, reconoció que en esa parte de la vía ya habían ocurrido otros accidentes, aunque sospechaban que la joven se despistó e intentó entrar en el arcén pero, probablemente pisó gravilla con las ruedas traseras del Toyota Aygo y terminó derrapando. Otros informantes confirmaron la versión y añadieron que la huella de la frenada era muy corta y cercana al lugar donde se produjo el choque con un Seat Arona.

La conductora dio algunos volantazos rápidos

Los investigadores afirmaron que la conductora del Toyota Aygo dio algunos volantazos rápidos antes de acabar chocando contra un coche en el carril opuesto y una línea continua que impedía el adelantamiento en esa parte de la vía. La mujer del Seat Arona es una agente de la Guardia Civil de 30 años que iba de Moralzarzal a Collado Villalba para incorporarse a su puesto a las 6, en el turno de la mañana.

Sin embargo, sus compañeros comenzaron a sospechar cuando la joven no llegó a la institución armada como estaba previsto.

La agente de la Guardia Civil permanece ingresada en estado con múltiples fracturas en las piernas y en la zona lumbar, aunque su estado sería estable dentro de la gravedad. La madre de la mujer de 30 años tuvo que recibir asistencia psicológica por parte de los psicólogos del Summa-112.

Las víctimas mortales tuvieron que ser excarceladas del coche

Cabe destacar que las cuatro jóvenes tuvieron que ser excarceladas porque estaban atrapadas en el coche. Los Bomberos de la Comunidad de Madrid y los sanitarios del Summa-112 solo pudieron confirmar el fallecimiento de las víctimas en el lugar de los hechos. Juan Carlos Rodríguez Osuna, alcalde de Moralzarzal, ha decretado tres días de luto oficial tras la muerte de la joven y las tres menores de edad.