Los agentes de la Policía Nacional han detenido a tres personas acusadas en Linares (Jaén) de retener ilegalmente a una joven de 27 años para practicarle un exorcismo. El incidente ocurrió el pasado mes de enero, cuando las fuerzas de seguridad acudieron a una vivienda donde al parecer se estaba ocurriendo un episodio de violencia de género. Sin embargo, en el domicilio, un hombre y una mujer negaron que estuviera sucediendo algo así en la casa.
La Policía escucha los gritos de una mujer en la casa
En ese momento, los policías comenzaron a escuchar los gritos de una mujer en el interior de la vivienda.
Acto seguido, los agentes descubrieron que un hombre intentaba callar a una mujer tapándole la boca. Los autores del incidente presuntamente fueron los padres y el ex suegro de la joven.
Además, el motivo del secuestro y posterior exorcismo de la joven habría sido su decisión de divorciarse. El exsuegro incluso se habría desplazado a Linares para someter a la mujer por haberse divorciado de su hijo. Cuanto los agentes de la Policía Nacional encontraron a la mujer, ella estaba llorando y muy nerviosa.
La mujer tenía marcas en su cuerpo
Los policías detectaron que la joven tenía marcas en varias partes de su cuerpo. La mujer explicó a los agentes de seguridad que había llegado hace un mes de Londres, donde se había divorciado de su pareja.
Sin embargo, cuando llegó a la vivienda en Jaén, sus padres la retuvieron y no la dejaron salir.
La joven ha explicado que su ex suegro llegó a Jaén para someterla y curarla mediante un exorcismo. Durante 22 días la mujer estuvo retenida en el domicilio sin hablar con nadie. Uno de los confesados ha declarado que asistía un religioso al ritual para sacar “el mal” del cuerpo de la víctima.
Cabe destacar que los arrestados fueron puestos a disposición judicial, aunque han quedado en libertad con cargos. Además se ha pedido una orden de alejamiento tras una de petición de la víctima. Según ha trascendido durante el secuestro, la joven solo era alimentada con azúcar, miel y agua.
La familia le pidió a la joven que regresara a Linares
Cabe destacar que la familia de origen pakistaní se encontraba en el país de forma legal y vivían en Linares, excepto sus dos hijas. Por ejemplo, la víctima vivía en Londres donde se casó y posteriormente se divorció. Cuando su familia se enteró de la noticia le pidieron que regresara a Jaén.
La Policía Nacional había recibido un aviso de una hermana de la joven que vivía en Barcelona quien advirtió que no podía contactar a su familiar. Además un vecino alertó a las fuerzas de seguridad sobre los gritos que escuchaba desde el interior de la vivienda de la familia.