Silvia Idalia Serrano estuvo durante un período de tres meses en un coma inducido en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital La Paz después de realizarse varias operaciones estéticas, sin embargo, murió este sábado. El 26 de abril de este año la joven se realizó varias cirugías en uno de los centros médicos de la clínica CEME. Justo al día siguiente de la intervención los doctores le dieron de alta, pese a los intensos dolores que estaba padeciendo, los cuales según el centro de salud eran totalmente normales. Posteriormente, Silvia ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos debido a una grave infección que le afectó su salud y que terminó en un coma inducido durante meses, del cual despertó hace pocas semanas cuando registró una mejoría leve.

La familia de Silvia ha denunciado este caso en los tribunales, debido a un presunto delito de lesiones a causa de imprudencia grave. Este caso está a cargo del Juzgado de Instrucción N° 46 de la ciudad de Madrid, que actualmente está investigando al médico cirujano y a otro doctor por un supuesto delito correspondiente a lesiones imprudentes.

La clínica CEME se defiende legalmente ante la muerte de su paciente Silvia Idalia Serrano

Por su parte, representantes de la clínica afirman que la intervención estética de Silvia se realizó sin complicaciones médicas y aseguran que todo se hizo correctamente. Desconocen la causa por la cual la joven se infectó con una bacteria que le ocasionó peligrosas secuelas.

El médico Francisco Cobo Reinoso, jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del centro hospitalario Ramón y Cajal de la ciudad de Madrid emitió un informe médico sobre este caso.

Una empleada a cargo del proceso posoperatorio de Silvia y el gerente de este centro de salud emitieron declaraciones contradictorias sobre este fallecimiento.

Específicamente sobre las condiciones clínicas de Silvia días después de la operación, según informó Europa Press. La empleada admitió que conocía todos los síntomas en la paciente que desvelaban que algo no estaba del todo bien en su boca durante los días posteriores a la intervención quirúrgica.

Silvia Idalia Serrano falleció por una infección, tras una intervención quirúrgica estética

Mientras tanto, representantes del centro clínico CEME han lamentado la muerte de Silvia y con relación al proceso judicial que se ha abierto recordaron el último informe médico para que sea considerado por el juzgado. En este documento se evidencia que no existieron infracciones de la ‘lex artir’ médica en ninguno de los trabajadores sanitarios que atendieron a la joven hasta su traslado al centro hospitalario La Paz.

El informe explica también que Silvia padeció una complicación de tipo infeccioso, la cual se llama fascitis necrotizante y que este es un caso que consideran científicamente “excepcional” después de algunas cirugías plásticas, cuyas bacterias provienen de la flora de los pacientes.