Lo que parecía que iba a ser una tarde de domingo entretenida había podido acabar en desastre. La montaña rusa del Parque de atracciones de Madrid, el Tren de la Mina, provoca un accidente que termina con 33 personas heridas leves. El suceso tuvo lugar pasadas las 2 y media del mediodía cuando, mientras se cargaba uno de los dos convoyes de pasajeros de la atracción, el otro recorría el circuito a toda velocidad, y por motivos que aun se desconocen embistió sin frenar al convoy que se encontraba detenido en la zona de carga de pasajeros.

33 personas, de las que 6 eran niños

Emergencias Madrid ha atendido a 33 personas en total, de los cuales seis son niños. La mayoría se encontraban afectados por contusiones y mareos leves, latizagos cervicales y crisis de ansiedad. Alguno de los heridos sufría traumatismos lumbares, torácicos y abdominales a consecuencia de haber chocado contra la barra de seguridad de la atracción. Finalmente 27 han sido trasladadas a varios hospitales madrileños para ser valorados exhaustivamente.

Los testigos que se encontraban esperando su turno para subir a la atracción afirman que ha habido un problema mientras la gente era subida al tren parado y que a partir de ahí han intentado alertar de que algo extraño sucedía.

Ante la negativa del personal del parque, que afirmaban que todo estaba en perfecto estado, ha sido cuando se han dado cuenta de que el tren en marcha se acercaba a toda velocidad hacia el detenido. En ese momento fue cuando el encargado fue corriendo al puesto de control de la atracción para activar los frenos de emergencia, pero no le dio tiempo y el tren chocó bruscamente contra la parte anterior del que se encontraba parado.

Según cuentan, el impacto fue enorme, y a pesar de la magnitud del mismo el convoy detenido ni se movió. La parte delantera del tren que ha chocado ha quedado totalmente destrozada.

La primera montaña rusa con realidad virtual

Un detalle a tener en cuenta es que esta atracción es la primera montaña rusa familiar que usa la tecnología de realidad virtual para enriquecer la experiencia del pasajero.

De esta manera, cuando alguien se monta en la atracción, se le ofrecen unas gafas de realidad virtual que le acompañan durante todo el viaje. Los accidentados pasajeros llevaban dichas gafas, lo cual provocó que no pudieran ver que se dirigían a toda velocidad contra el tren de delante, no pudiendo protegerse del impacto. Según otra testigo, a causa de esto se debían la mayoría de heridas de los pasajeros: dientes rotos o desaparecidos, las gafas clavadas en la cara, y grandes contusiones en las rodillas, espalda y cuello. De hecho, afirma que una gran cantidad de niños requerían collarín.

Parque de Atracciones de Madrid, a través de un portavoz, ha dicho que la prioridad es la de atender a los heridos y que posteriormente entrarán a inspeccionar la atracción para conocer las causas del incidente.

De hecho, quienes se ocuparán de la inspección será el equipo de la policía municipal de Madrid, siendo los primeros en acceder al tren. Parque de Atracciones lamenta lo sucedido y, aunque destacan que los heridos son leves, no esconden el disgusto por lo sucedido. Este suceso llega pocos meses después de que se produjera un incendio en las obras de Ferrariland, en PortAventura, y una semana después de que, por un fallo de seguridad, un trapecista del Mad Cool se estrellara contra el suelo.

El Tren de la Mina, la atracción siniestrada, es una de las últimas construidas en el parque. Circula a 55 kilómetros por hora. En su punto más alto llega a los 17,5 metros desde el suelo. La atracción tiene dos trenes, cada uno con 18 coches, y una capacidad máxima de 32 personas por tren.

La altura mínima para poder acceder es de 100 centímetros y la máxima, de 195. El recorrido se efectúa en dos minutos y medio a lo largo de 450 metros. La capacidad máxima es de 1.000 visitantes a la hora, aunque se puede reducir a 500 a la hora si la afluencia de público en el parque es reducida, al retirarse uno de los dos trenes.